El martes 19 de octubre las autoridades de Boston declararon como «emergencia de salud pública» la adicción y escasez de vivienda en la ciudad, ante esto la alcaldesa Kim Janey presentó un plan para abordar la crisis en el área conocida como Mass. and Cass.
Según una orden ejecutiva de la alcaldía, los funcionarios de la ciudad, en asociación con las autoridades estatales, crearán una estructura que ofrecerá refugio y tratamiento a las personas que se encuentran en tiendas de campaña.
La ciudad planea comenzar a eliminar las carpas cerca de Massachusetts Avenue y Melnea Cass Boulevard. Los funcionarios no retirarán ninguna tienda de campaña sin haberlo notificado con anticipación.
«Ya no se permitirán tiendas de campaña y refugios temporales en la ciudad de Boston». Autoridades estimaron que hay alrededor de 150 tiendas de campaña en el área.
“Estas carpas se han convertido en el sitio de enfermedades infecciosas, agresiones sexuales, tráfico de personas, posibles sobredosis y violencia”, dijo Janey en una conferencia de prensa.
La orden también establece «aumentar el control de la delincuencia y la violencia por medio del ejercicio de la ley y los poderes existentes».
Asimismo, la Comisión de Salud Pública de Boston (BPHC) indicó que las carpas generan «problemas de salud pública, enfermedades infecciosas, insalubridad e inseguridad».
«Las tiendas de campaña no son habitables. Carecen de agua potable e instalaciones de higiene adecuadas y representan un riesgo al estar expuestas a cambios de clima», comentó la Dra. Bisola Ojikutu, directora ejecutiva de la BPHC. Las personas que viven así, dijo, están «en mayor riesgo de sobredosis, trata de personas, agresión sexual y otras formas de violencia».
Janey aseguró que se trata de “una emergencia. Esta es una crisis de salud pública (…) y vamos a hacer todo lo posible para asegurarnos de continuar nuestro trabajo como ciudad y nuestra colaboración con nuestros socios para abordar esta crisis de salud pública ”.