El exvicepresidente Mike Pence fue interrumpido el viernes en una conferencia de conservadores sociales, con una docena de activistas gritando «traidor» mientras se presentaba.
«Soy cristiano, conservador y republicano, en ese orden», dijo Pence, mientras los vítores ahogaban a los abucheos en la cumbre Camino a la Mayoría de la Coalición Fe y Libertad.
No era la primera vez que Pence se había enfrentado a conservadores furiosos por los resultados de las elecciones de 2020 e insistiendo en que debería haber actuado para evitar que el Congreso afirmara la victoria del presidente Biden. Dos días antes de la certificación del 6 de enero de la votación del colegio electoral de 2020, los activistas en un mitin de Pence en Georgia lo interrumpieron y exigieron que «hiciera lo correcto».
El 6 de enero, una multitud de partidarios de Trump irrumpió en el Capitolio y algunos gritaron «cuelguen a Mike Pence». Pence y su familia fueron sacados de una habitación cerca de la cámara del Senado por la policía y llevados a un lugar seguro.
Mayoría en apoyo a Pence
La gran mayoría de los activistas en la conferencia anual, celebrada desde 2010, se quedaron y aplaudieron. El exvicepresidente pronunció su cuarto discurso desde que dejó el cargo. Dos semanas antes, en New Hampshire, dijo que probablemente «nunca estaría de acuerdo» con Trump sobre el esfuerzo del expresidente para revertir las elecciones y lo que ocurrió el 6 de enero, pero se inclinó hacia atacar a los demócratas por explotar la reacción.
Pence no mencionó la confirmación de la elección aquí, sino que actualizó epen gran medida los comentarios que ha hecho a otras audiencias y argumentó que la administración Biden estaba deshaciendo el trabajo de un presidente que había hecho de Estados Unidos «más grande que nunca».
The Washington Post. Traducción libre por El Tiempo Latino
