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Hace varias semanas la campaña de Martha Coakley para la gobernación reveló el anuncio de televisión “Mi Hermano Eduardo” en él cual la candidata habla públicamente sobre su hermano menor, Edward, el cual sufrió de una enfermedad mental por muchos años y se quitó la vida a la edad de 33 años. (Vea el video visitando este enlace: http://youtu.be/RFLXv1AcbvI )

Martha Coakley Television Ad: Edward

Los asuntos de salud mental aquejan a todas las familias sin importar la raza, situación económica o creencias. En Massachusetts más de 200 mil adultos viven con una enfermedad mental grave, como esquizofrenia, depresión o trastorno bipolar muchas de las cuales llevan a personas al abuso de substancias o viceversa. Entre los jóvenes, el problema es aún más pronunciado; a nivel nacional, uno de cada diez niños vive con una enfermedad mental que afecta seriamente su vida. En Massachusetts eso se traduce a más de 84,000 niños entre las edades entre nueve y dieciocho años. Al igual que Edward, muchos jóvenes temen al estigma que acarrean las enfermedades mentales, por lo que no piden ayuda a sus compañeros (quienes a menudo son los primeros en notar los signos). No dicen nada, y al final de cuentas su enfermedad no es tratada.

«Cuando sea gobernadora, vamos a tomar medidas reales para aumentar el acceso y reducir el estigma en torno al cuidado de la salud mental. Mi familia tuvo problemas, al igual que muchas familias que tienen dificultades en Massachusetts. Nadie debe sufrir en silencio nunca más”, mencionó Coakley en un comunicado de prensa sobre el anuncio televisivo y su plan para mejorar los servicios de salud mental.

El plan de Coakley para mejorar los servicios de salud mental busca empoderar a aquellos que sufren de enfermedades mentales para que busquen ayuda. Su plan también apoyará a las familias, y aumentará el número de proveedores, de modo que los servicios orientados a la recuperación estén disponibles para todo el que lo necesite en Massachusetts.

Además la propuesta de la candidata demócrata a la gobernación de Massachusetts incluye la eliminación de barreras para acceder servicios de calidad incluyendo el garantizar que los servicios de salud mental sean respetuosos y sensibles a las creencias sobre la salud considerando los valores y las necesidades culturales y lingüísticas de las diversas comunidades de Massachusetts.

El plan también intentará ampliar la educación pública sobre salud mental para aumentar el conocimiento, fomentar el entendimiento en la comunidad, y ayudar a eliminar el estigma que rodea a las enfermedades mentales en particular entre los jóvenes y los veteranos.

Ya es hora de hablar de estos asuntos entre nosotros. La falta de acceso a los servicios de salud mental sigue siendo el problema más grave dentro de la comunidad latina. Además, los latinos usamos los servicios de salud mental con mucha menor frecuencia que otros grupos étnicos o raciales. Según un informe reciente, menos del 10 por ciento de los hispanos o latinos que sufren un trastorno mental buscan los servicios de un especialista en salud mental.

El 4 de noviembre tenemos la oportunidad de elegir a una gobernadora que está dispuesta a hacerle frente los asuntos que nos afectan, incluso a estas cosas que a veces mantenemos en silencio.

“Mi hermano Eduardo era un niño lindo y divertido y muy inteligente. Cuando asistió a la universidad tuvo una crisis mental. Él no sabía que esto solo era el comienzo de una larga lucha. Desafortunadamente no sobrevivió y se quitó la vida un año y medio después que murieran mis padres. Él no tenía a dónde acudir. A través de esta campaña siempre me he encontrado con personas que me dicen- ‘Ese era mi hermano’, ‘esa era mi esposa o esposo’, o ‘mi hija’. Muchos en Massachusetts creen que esto es una necesidad crucial y como gobernadora estoy comprometida a hacerle frente”.

Martha Coakley, en un anuncio de televisión sobre salud mental.

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