La obesidad es una enfermedad que afecta a muchos latinos en Estados Unidos pero muchos encontramos barreras para acceder a la atención médica necesaria.
Patricia Neece, presidenta saliente de la Coalición de Acción contra la Obesidad, lo sabe muy bien.
Durante un evento en el National Press Club en Washington, D.C., compartió su experiencia personal de vivir con dolor extremo de cadera, mal diagnosticado debido a prejuicios médicos relacionados con su peso.
Los médicos atribuyeron su malestar a la obesidad sin realizar pruebas adicionales. Solo al cambiar de ortopedista, descubrió que sufría de escoliosis extrema.
“He enfrentado prejuicios en el campo médico y en los sistemas de salud prácticamente toda mi vida, porque he tenido obesidad desde la infancia”,compartió Neece.
Estigma, prejuicio y discriminación
Los estigmas y prejuicios, incluyendo la discriminación por edad, son barreras para recibir atención médica adecuada para las personas con obesidad.
Esto puede llevar a diagnósticos incorrectos y complicaciones de salud adicionales.
Declaración de derechos de personas con obesidad
La Declaración de Derechos de las Personas con Obesidad busca empoderar a los pacientes y desmantelar estos prejuicios entre los profesionales de la salud.
Esta declaración demanda derechos como:
- Acceso a información exacta, clara, confiable y accesible.
- Respeto.
- Autodeterminación en el tratamiento.
- Atención por parte de personal profesional y calificado.
- Atención centrada en el paciente.
- Acceso a servicios de salud para el tratamiento de la obesidad.
- Atención de calidad para adultos mayores con obesidad.
- Acceso a atención médica que trate la obesidad como una enfermedad.
Impacto en la comunidad latina
Las personas de origen latino son desproporcionadamente afectadas por la obesidad, teniendo la segunda prevalencia más alta de obesidad ajustada por edad en los Estados Unidos.
La obesidad puede aumentar el riesgo de otras condiciones, como enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2.
Llamado a la cobertura integral
La Declaración también exige una cobertura de salud integral para la prevención y el tratamiento de la obesidad.
Actualmente, Medicare excluye la cobertura de medicamentos contra la obesidad aprobados por la FDA. Además, el acceso a terapias conductuales intensivas está limitado.
Los costos de los medicamentos para perder peso, como los GLP-1, pueden oscilar entre $1.000 y $1.300 al mes o entre $12.000 y más de $15.000 al año sin cobertura médica.
“Los medicamentos para perder peso deben estar incluidos en la cobertura de Medicare para asegurar que las personas que sufren de obesidad tengan acceso a un tratamiento adecuado”dijo la doctora Elena Ríos, Presidenta de la Asociación Nacional de Médicos Hispanos.
Este esfuerzo es solo el primer paso hacia un futuro médico más equitativo. Para obtener más información sobre esta iniciativa, visita right2obesitycare.org/.
