Estas restricciones adicionales son cruciales para mantener a Massachusetts, uno de los estados con menor violencia armada, aún más seguro.
La Cámara de Representantes de Massachusetts ha decidido con 120 votos a favor y solo 38 en contra, con una votación mayoritaria, endurecer aún más sus ya estrictas leyes de control de armas.
Las principales propuestas del paquete legislativo incluyen:
- Potenciar la prohibición actual sobre armas de asalto.
- Definir con mayor precisión las zonas en las que no se pueden portar armas.
- Abordar la problemática de las «armas fantasma» sin registro.
- Ampliar la ley «bandera roja», permitiendo a los jueces suspender licencias de armas a individuos considerados una amenaza para sí mismos u otros.
A pesar del respaldo contundente de 120-38, el proyecto encontró resistencia entre propietarios de armas y ciertos grupos policiales. Michael Day, representante de Stoneham y autor del proyecto, enfatizó que las reformas buscan modernizar, no vulnerar derechos.
Durante el debate, se presentaron varias enmiendas, pero la mayoría fueron desestimadas. Tras críticas de la Asociación de Jefes de Policía de Massachusetts, se modificó el proyecto para permitir que los policías fuera de servicio porten sus armas en lugares generalmente prohibidos, como escuelas y edificios gubernamentales.
Algunos republicanos expresaron su preocupación en el recinto. El representante republicano Peter Durant argumentó que, aunque es esencial garantizar la seguridad, no se deben limitar las libertades de los ciudadanos.
No obstante, defensores del proyecto sostienen que Donna Stevenson, del capítulo de Massachusetts de Moms Demand Action, declaró a WBUR: “Hoy, los legisladores de la Cámara han enviado un mensaje claro: trabajaremos para erradicar la violencia armada en nuestro estado.”
La Rep. del Distrito 11 Judith Garcia confirmó su satisfacción por esta contundente decisión y nos informó que «ahora le toca al Senado del Estado decidir».
Fuente principal: State House News Service y WBUR.
