El presidente Joe Biden prometió este domingo que Estados Unidos continuará proporcionando vacunas a los países más pobres del mundo, para frenar la pandemia de COVID-19. Dejó entrever que podría hacer otra donación sustancial de dosis de vacunas el próximo año.
Biden dijo que no quería comprometerse antes de tener planes concretos, pero agregó que Estados Unidos podría “estar en condiciones de proporcionar otros mil millones” de dosis durante los próximos dos años. El jueves anunció que había comprado 500 millones de dosis de la vacuna Pfizer para donar a países de ingresos bajos y medios.
También mencionó que los líderes del G-7 acordaron que las democracias ricas deben continuar ayudando al mundo a vacunar a la población mundial, con énfasis en la amenaza que representa el virus a medida que continúa propagándose.
“También es lo correcto en términos de nuestra propia salud, nuestra propia seguridad (…) No se puede construir un muro lo suficientemente alto para evitar nuevas cepas”, reconoció.
Comentó además que los líderes del G-7 acordaron apoyar a los países con la logística de vacunar a sus ciudadanos mientras los ayudan a desarrollar la capacidad para fabricar vacunas.
“Hubo un claro consenso entre todos nuestros colegas en el G-7 de que este no era el final (…) Íbamos a quedarnos en ello hasta que pudiéramos satisfacer las necesidades de todo el mundo”.
Fuente: Tyler Pager/The Washington Post.