Micaela Phelan, estudiante de la Brookline Public High School, ha sido conmemorada con el Premio de Excelencia Académica de la Asociación de Superintendentes de Escuelas de Massachusetts en 2024. Este reconocimiento destaca no solo su excelencia académica, sino también su resiliencia frente a desafíos personales y su compromiso con la comunidad.
“Los Premios de Excelencia de Massachusetts se reservan para algunos de nuestros estudiantes más destacados, aquellos que no solo han demostrado su potencial académico e integridad, sino que también han mostrado gran determinación, perseverancia y fortaleza de carácter”, dijo Linus Guillory, superintendente de Brookline Public High Schools.
“Fue una gran sorpresa haberlo recibido, de verdad no me lo esperaba”, comentó Micaela al reflexionar sobre el momento en que recibió la noticia de su premio. “Creo que lo que más me sorprendió fue darme cuenta de que todas esas actividades que hice, solo por mantenerme ocupada o conocer más personas, realmente estaban siendo reconocidas. Me hizo entender que, aunque uno haga cosas por sí mismo, si tienen un buen impacto, alguien lo verá eventualmente”, expresó.
Resiliencia como inmigrante
Micaela forma parte de una familia de inmigrantes peruanos que llegó a Estados Unidos hace tres años en busca de mejores oportunidades de salud para su hermana menor, quien necesitaba una cirugía cardíaca. Como relata su madre, Ana Burgos “aquí tuvo la oportunidad de ser operada en Boston Children ‘s Hospital. Tuvimos que venir a Boston por esa emergencia, ya que en Perú no podían hacer la operación”, comentó.
Durante este tiempo, la familia se alojó con un pariente en Brookline, lo que les permitió adaptarse a su nueva vida en Estados Unidos. A pesar de las dificultades económicas y los retos que implica vivir en una ciudad cara, Ana destaca que “desde el principio, la escuela de Brookline nos brindó apoyo. A pesar de no tener toda la documentación legal, nunca nos discriminó. Micaela siempre encontró una manera de seguir adelante, y yo siempre me sentí respaldada por la comunidad escolar”, agregó.
Micaela también destacó el papel fundamental que la escuela jugó en su éxito. A pesar de las limitaciones iniciales, como no ser elegible para ciertos programas debido a su nivel de inglés, la escuela siempre encontró formas de apoyarla. “Brookline High School me ha dado muchas oportunidades. Al principio, no pude acceder a ciertos programas, pero la escuela siempre estuvo ahí para ayudarme a encontrar otras maneras de crecer”, exclamó.
Jenny Longmire, decana del Brookline High School, resaltó como a pesar que “Micaela y su familia se mudaron varias veces en búsqueda de una vivienda asequible, ella nunca permitió que esto afectara su actitud ni su rendimiento académico demostrando como su resiliencia y determinación la convierten en un ejemplo de fortaleza para otros estudiantes”, dijo.
Orgullo latino
Micaela ha demostrado un liderazgo ejemplar hacia otros estudiantes latinos, tanto dentro como fuera de clase. Es embajadora de su colegio, dedicándose a apoyar a estudiantes que, “como yo, son inmigrantes y hablan español”, agregó. Además, es presidenta del Club Latino de su escuela, donde trabaja para promover la inclusión, el orgullo por su herencia cultural y abogar por una mayor representación de los jóvenes latinos en la comunidad escolar.
También, Micaela se ha comprometido con el servicio comunitario acumulando más de 100 horas de voluntariado en lugares como la Despensa de Alimentos de Brookline y el Teen Center y también ha sobresalido como atleta practicando natación, baloncesto, lucha libre y jiu-jitsu, destacando en este último al ganar una medalla de oro en la World Jiu-Jitsu League.
“Lo que más me ayudó a recibir este reconocimiento fue ser abierta sobre mis dificultades. Cuando compartí mis experiencias con mis profesores, me dieron mucho apoyo. Me sentí comprendida, y eso me abrió muchas puertas”, afirmó Micaela, destacando la importancia del apoyo emocional y académico recibido en la escuela.
Micaela también resaltó el significado de su premio para la comunidad latina, destacando la importancia de servir de inspiración para otros jóvenes, “este premio no solo es un reconocimiento a mí, sino también una motivación para otros jóvenes latinos en Boston. Lo importante es hacer las cosas porque realmente te interesan, no por la aprobación de otros. Si haces lo correcto, tarde o temprano alguien lo notará”, concluyó.