La policía ambiental de Connecticut sacrificó el pasado sábado a un oso negro de 280 libras después de que mordió a una mujer en Cheshire.
El Departamento de Energía y Protección Ambiental de Connecticut, en un comunicado de prensa, dijo que los oficiales de la Policía de Conservación Ambiental respondieron a los informes de que un oso negro había mordido a una mujer alrededor de las 4 de la tarde.
La policía de Cheshire informó que el oso se acercó a la mujer que estaba sentada en su patio trasero cerca de las avenidas Cornwall y Oak.
La mujer sufrió heridas leves y se negó a recibir tratamiento.
La policía ambiental localizó más tarde al oso macho y lo sacrificó tras una búsqueda en la zona. La policía luego entregó el oso a los biólogos de vida silvestre del DEEP para que lo examinaran, lo que podría llevar varios días.
La policía dijo que el oso se movía “lentamente” y no parecía estar sano. Cuando llegaron los agentes, el oso ya no estaba en la zona.
La investigación de este incidente continúa en curso.
Los osos negros son cada vez más comunes en Connecticut. Los informes de avistamientos de osos, incluso en áreas residenciales densamente pobladas, están aumentando.
La División de Vida Silvestre también ha visto un aumento en la cantidad de conflictos informados con osos negros. Todos los residentes deben tomarse el tiempo para “conocer a los osos” y aprender sobre las mejores prácticas para reducir la probabilidad de un encuentro con un oso y saber qué hacer en caso de un encuentro.
DEEP insta a los residentes a recordar que, si bien normalmente son dóciles, los osos negros son grandes y extremadamente poderosos y, al igual que otros animales salvajes, su comportamiento puede ser impredecible.
La policía ambiental alienta a las personas a observar a los osos desde la distancia.
