Reinaldo es de El Salvador y trabaja como limpiavidrios desde el 2004. “Cuando llegue de mi país fue el primer trabajo que tuve, lo aprendí y me quede acá”. Indica también que el salario es similar al de un empleado de restaurante. Sin embargo, tiene preferencia en continuar con su ocupación.
El edificio más alto que ha limpiado tiene 50 pisos. El trabajador comparte que mientras esté asegurado, no presenta ningún riesgo. En los 18 años de experiencia su destreza ha ayudado a que los residentes de Boston tengan sus ventanas limpias de manera rápida y profesional.
