La Junta de la MBTA aprobó un plan para sancionar a los conductores que estacionen en carriles de autobús o bloqueen paradas, con el objetivo de mejorar la eficiencia y accesibilidad del transporte en el área metropolitana de Boston.
Esta medida, respaldada por una ley firmada por la gobernadora Maura Healey en enero de 2025, utilizará cámaras automatizadas en autobuses y paradas para detectar y multar a los infractores.
Las nuevas reglas abarcan más de 40 millas de carriles de autobús y alrededor de 7,000 paradas en todo el sistema MBTA. Se busca reducir los bloqueos que ralentizan el transporte y afectan especialmente a pasajeros con movilidad limitada, muchos de ellos residentes minoritarios, de bajos ingresos o dependientes del transporte público.
Multas y aplicación
Los conductores particulares recibirán multas de 25 dólares por la primera infracción, 50 dólares por la segunda, 100 dólares por la tercera y 125 dólares a partir de la cuarta infracción dentro de 180 días. Estacionar frente a una parada de autobús implicará una multa fija de 100 dólares.
Los vehículos comerciales enfrentarán sanciones mayores, que comienzan en 50 dólares y pueden llegar a 125 dólares dependiendo de la frecuencia de las infracciones en un año. Las cámaras capturarán las placas de los vehículos y las multas se enviarán por correo tras revisión humana para garantizar su precisión.
La implementación inicial se centrará en las rutas Silver Line SL4 y SL5, con planes de extenderla a otras rutas a mediados de 2026.
Apelaciones y excepciones
Los conductores podrán apelar las multas recibidas. Habrá excepciones en casos de emergencia, cumplimiento de indicaciones policiales, señalización específica o situaciones que involucren la seguridad de los peatones. Además, las grabaciones de las cámaras se borrarán después de 120 días, a menos que sean necesarias para resolver algún reclamo.