En la planta baja, hay una clase de computación. En la planta superior, hay una sala de juegos improvisada. Al lado, hay un santuario religioso.
La Iglesia Bethel African Methodist Episcopal en Jamaica Plain ha convertido una antigua rectoría en un refugio temporal que acoge a ocho familias sin hogar. Una organización sin fines de lucro está proporcionando servicios sociales y la ciudad de Boston está aportando fondos iniciales para amueblar y abastecer este lugar para las familias que esperan unidades en el sistema de refugios familiares del estado.
Y, según todas las cuentas, la comunidad circundante ha dado un paso adelante para ofrecerse como voluntaria y donar una amplia gama de necesidades, desde abrigos de invierno hasta computadoras.
«Nuestra esperanza es que se convierta en un modelo de cómo otras comunidades de fe también pueden movilizarse», dijo Gloria White-Hammond, co-pastora de la iglesia y pediatra jubilada.
Señalando un dormitorio con camas bien hechas, dijo: «eso solía ser mi oficina. Empacamos todo para que pueda acomodar a otras personas. Me encanta escuchar el sonido de los niños jugando».
En el último año, Massachusetts ha visto un número récord de familias sin hogar. Sus necesidades han sobrepasado el sistema de refugios del estado, lo que llevó a la gobernadora Maura Healey a limitar la población de los refugios y crear una lista de espera. Hasta el viernes por la tarde, 367 familias sin hogar estaban en la lista de espera.
En las seis semanas desde que comenzó la lista de espera, se han abierto una serie de refugios temporales de emergencia. Estos incluyen refugios privados financiados por un programa de subvenciones de United Way, así como sitios administrados por el estado. El viernes, el estado abrió un nuevo refugio temporal que solo está abierto durante la noche. Se encuentra en un antiguo tribunal en Cambridge y puede albergar hasta 70 familias.
Sin embargo, hay más familias en la lista de espera de las que hay plazas en los refugios de emergencia. Esto ha significado que algunas familias han dormido en el Logan Airport. También hay informes de familias durmiendo al aire libre y en coches.
Immigrant Family Services Institute, una organización sin fines de lucro que sirve a la comunidad haitiana, ha apoyado a muchas familias en la lista de espera, incluyendo la reserva de habitaciones de hotel. Ahora, el grupo se está asociando con la Iglesia AME Bethel para abrir un refugio temporal. La organización sin fines de lucro está proporcionando varios servicios para las familias alojadas en la antigua rectoría, incluyendo trabajadores sociales que visitan regularmente para ayudar a las familias a navegar todo, desde el sistema escolar hasta el sistema de refugios.
Geralde Gabeau, directora ejecutiva del instituto, dijo que ha quedado impresionada por cómo la comunidad en Jamaica Plain ha entrado en acción para ayudar a las familias. «Todos quieren ayudar. Todos quieren intervenir, lo cual es maravilloso. Y creo que eso es lo que necesitamos hacer en cada comunidad», dijo.
En las próximas semanas, Gabeau dijo que llevará a otros grupos religiosos a visitar el refugio temporal de la iglesia para ayudarles a visualizar lo que pueden hacer con su propio espacio.
«A menudo la gente piensa que es difícil», dijo. «Pero lo que les digo es que difícil no significa imposible.»
Un portavoz de la ciudad de Boston escribió en un correo electrónico que «el modelo está destinado a demostrar la viabilidad de cómo podemos proporcionar a las familias recién llegadas formación profesional, colocaciones laborales y alojamiento estable en un plazo acelerado, con la esperanza de que tal modelo pueda ayudar a aliviar la capacidad en el sistema de refugios si se implementa en todo el estado».
El portavoz no respondió preguntas sobre cuánto está pagando la ciudad para hacer posible este espacio. El espacio de la iglesia abrió a mediados de noviembre.
«Jesús no pudo encontrar un lugar para nacer, ¿verdad? Pero alguien dio un paso al frente y apareció una habitación, así que nosotros tenemos una casa entera disponible para hacer lo mismo», dijo la co-pastora White-Hammond.
Varios feligreses de Bethel AME están ofreciéndose como voluntarios para ayudar a las familias sin hogar, todas recién llegadas como migrantes de Haití.
«Lo mejor es que tienes personas que están ansiosas por aprender y luego también están extremadamente agradecidas», dijo Daniel Saintival, quien ayuda como profesor de inglés dos veces por semana.
Yves Alfred, quien se ha alojado en el refugio con su esposa y tres hijos, dijo que está agradecido de tener un lugar cálido donde quedarse. Y está feliz de haber podido conocer a otras familias en el refugio temporal.
«Vivimos juntos, nos entendemos», dijo, hablando a través de un traductor.
Si desea leerlo en inglés visite WBUR.
