Un vuelo de carga de Air Atlanta Icelandic, que viajaba de Nueva York a Bélgica, se encontró con un singular aprieto en pleno vuelo que dio lugar a la eliminación de 20 toneladas de combustible cerca de Martha’s Vineyard, Massachusetts.
El vuelo se vió obligado a tomar esta medida sin precedentes debido a una complicación sorprendente: un caballo se había escapado de su recinto 30 minutos después del despegue. Por los momentos no se sabe cómo el caballo logró escapar, pero permaneció sin sujetar hasta que el avión aterrizó en JFK, según un audio obtenido por You Can See ATC a través de Live ATC.
El vuelo, que había despegado del aeropuerto internacional John F. Kennedy la tarde del 9 de noviembre, se dirigía al aeropuerto belga de Lieja cuando se produjo el inesperado contratiempo.
Mientras sobrevolaba la región al sur de Martha’s Vineyard, el piloto se comunicó con el centro de control aéreo de Boston para informar de la inusual situación. El diálogo fue captado y posteriormente publicado en LiveATC.net, un sitio web dedicado al seguimiento de las comunicaciones de tráfico aéreo.
“Nuestro vuelo es un avión de carga que transporta un caballo vivo. El caballo ha conseguido escapar de su recinto. A pesar de que no hay problemas con el vuelo en sí, el caballo sin asegurar nos obliga a regresar a Nueva York, ya que no podemos volver a sujetarlo”, explicó el piloto.
Al recibir autorización para regresar a Nueva York, el piloto tuvo que alertar a los controladores aéreos de Boston sobre otro problema. El avión transportaba un excedente de 20 toneladas de combustible que era necesario eliminar. Esta operación de eliminación de combustible comenzó a unas 10 millas al oeste de Martha’s Vineyard y duró unos 20 minutos mientras el avión volaba al sur de Cape Cod.
Durante el proceso de eliminación del combustible, el piloto pidió al control de tráfico aéreo que se coordinara para que un veterinario del aeropuerto JFK examinara al caballo a su llegada.
La operación de descarga de combustible se completó al oeste de Cape Cod, y el avión trazó su ruta de regreso sobre Nantucket, aterrizando finalmente de vuelta en Nueva York poco después de las 4 de la tarde.
El vertido de combustible es un último recurso para los pilotos que a veces es necesario para disminuir el peso de un avión antes de aterrizar, según el sitio de noticias de aviación Simple Flying. Las aeronaves están diseñadas para aterrizar con niveles de peso predeterminados que son inferiores a sus pesos de despegue. Esto se hace para disminuir el riesgo de un impacto fuerte al aterrizar.
El combustible se dispersa desde las alas de un avión y debe hacerse a una altitud lo suficientemente alta como para que el combustible se disperse en el aire en lugar de hacer contacto con el suelo. También se indica a los pilotos que solo arrojen combustible lejos de áreas densamente pobladas.