La actual gobernadora electa de Massachusetts, Maura Healey anunció un acuerdo multiestatal de $1 millón con la empresa CarMax por violar leyes estatales de protección al consumidor.
A la empresa automovilística CarMax se le realizó una investigación por vender vehículos usados con “Recall” y afirmar a los clientes que sus autos son seguros.
Cabe destacar que un “Recall” es un llamado de atención o una alerta de los fabricantes de automóviles a los dueños de los vehículos, en el que la marca ha detectado una falla específica que puede atentar con el rendimiento y seguridad del auto.
Los estados alegaron, que CarMax, realizaba publicidad engañosa a los consumidores catalogando los autos en venta cómo “seguros”, pero estos vehículos no estaban inspeccionados adecuadamente.
La gobernadora, informó que la compra de un vehículo representa un gasto financiero para muchas personas y familias y ellos necesitan estar seguro de que el automóvil que están adquiriendo es seguro y funciona correctamente.
Healey acordó que la empresa de autos CarMax pagará por sus prácticas y deberá realizar importantes divulgaciones de seguridad a los consumidores que compran automóviles.
La Ley de Seguridad de Vehículos Motorizados prohíbe la venta de automóviles nuevos con open recall, sin embargo, para carros usados no hay tal prohibición, siempre y cuando las empresas alerten a los compradores de esta falla antes de adquirir el vehículo.
CarMax deberá presentar al consumidor copias de cualquier open recall, la empresa seguirá utilizando la herramienta de número de identificación del vehículo de la Administración Nacional de Tráfico y Seguridad en las Carreteras para informar a los consumidores
La empresa de autos posee un hipervínculo para que los compradores verifiquen en línea si el vehículo posee open recall.
