La residente de un condominio de gran altura en Bangkok, Tailandia cortó la cuerda de seguridad que sostenía a dos pintores. La mujer aparentemente estaba enojada porque no le habían dicho que iban a realizar un trabajo y los dejó colgados por encima del piso 26 hasta que una pareja los rescató.
La mujer se enfrenta a cargos de intento de asesinato y de destrucción de la propiedad, dijo el coronel Pongjak Preechakarunpong, jefe de la comisaría de Pak Kret, al norte de la capital tailandesa, a The Associated Press.
El contexto: Pongjak no informó que llevó a la mujer a cortar la cuerda, pero los medios de comunicación tailandeses informaron de que, al parecer, se sintió frustrada cuando los trabajadores aparecieron fuera de su habitación y no había visto un anuncio del condominio de que iban a realizar trabajos el 12 de octubre.
La dirección del edificio acompañó a los pintores a denunciar el incidente a la policía. La mujer responsable del hecho podría enfrentar una pena de prisión de hasta 20 años si es declarada culpable de un cargo de intento de asesinato
- Un video publicado en las redes sociales mostraba a dos pintores pedir ayuda a los residentes de la planta 26 que abrieran la ventana y les dejaran entrar.
- Uno de los pintores, un ciudadano de Myanmar (Birmania) llamado Song, contó que él y sus dos amigos habían bajado desde el piso 32 para reparar una grieta en el edificio.
- Cuando llegó al piso 30, sintió que la cuerda era más pesada. Al mirar hacia abajo, vio que alguien en el piso 21 abría una ventana y cortaba su cuerda. Intentó pedir ayuda a otras unidades, pero no había nadie.
¿Qué dicen? Un tercer compañero siguió apoyándolos desde el último piso, informó Praphaiwan Setsing, el residente que los salvó. Praphaiwan relató que su marido, de nacionalidad británica, se dio cuenta de que un pintor hacía señas para pedir ayuda y la llamó para que hablara con ellos.
- «Este incidente es impactante y no debería ocurrir en absoluto», afirmó Praphaiwan .
- La mujer, de 34 años, negó en un primer momento ser la responsable, pero la policía envió la cuerda cortada para un análisis de huellas dactilares y de ADN, según informaron los medios de comunicación.
- Pongjak reportó que la sospechosa fue puesta en libertad temporalmente.
- Después de que la policía le mostrara las imágenes del circuito cerrado de televisión y las pruebas forenses, la mujer confesó, pero negó cualquier intención de matar a los trabajadores.
Fuente principal de la noticia: AP