ir al contenido

Hispano, latino y latinx: ¿cuál es la diferencia entre estos términos?

La comunidad latina es actualmente la minoría más grande en los Estados Unidos; sin embargo, a muchas personas todavía les resulta confuso cómo referirse a este grupo diverso de personas.

Es comprensible que clasificar las distintas culturas de América Latina bajo un solo término general sea complicado. Posiblemente hayas escuchado hispano, latino o latinx. Pero, ¿existe una diferencia real entre estas palabras?

Hispano: el término hispano se originó durante la Administración de Nixon en la década de 1970 para clasificar mejor a las personas de origen hispanohablante después de que las organizaciones que prestaban servicios a hispanohablantes presionaron al gobierno de los Estados Unidos para que abordara sus problemas y preocupaciones. La palabra proviene del término español Hispania, que es la geografía que más tarde se convirtió en España; este incluye todas las naciones de habla hispana.

Según un estudio del Pew Research Center, el 50 por ciento de quienes tienen sus raíces en América Latina no muestran preferencia por el término hispano sobre el latino. Sin embargo, el 50 por ciento que lo prefiere, lo hace en una proporción de dos a uno.

Quienes se oponen al término hispano señalan que el término ignora las respectivas culturas y conflictos de los diversos pueblos de América Latina. Por ejemplo, excluye a las poblaciones indígenas que no hablan español. Lo que hace única a la comunidad latinoamericana es su raza mixta, que comprende herencias blancas, afroamericanas, asiáticas y nativas americanas. Según el Pew Research Center, el 67 por ciento de las personas hispanas y latinas consideran que su origen étnico es inseparable de su origen multirracial.

Latino: la campaña para la inclusión del término fue iniciada en la década de 1980 por un grupo activista latino, para muchos tiene un origen más cercano a casa, refiriéndose explícitamente a países de América Central y del Sur, junto con el Caribe.

El censo de los Estados Unidos adoptó oficialmente el término en 2000, casi 30 años después del primer uso de la palabra, pero el término no reemplaza al hispano. En cambio, los términos coexisten.

En muchos casos, las personas se identifican como hispanas y latinas, ya que ambos términos se aplican a sus antecedentes. Por ejemplo, alguien de Brasil es latino porque es de América Latina, pero su idioma no es el español, es el portugués. Mientras que alguien de Colombia es latino y también hispano porque habla español.

Sin embargo, el término también ha sido objeto de críticas, en particular por parte de activistas feministas y de género fluido que buscan acabar con el binarismo.

Latinx: el término latinx es relativamente nuevo, comenzó a surgir en 2004 en el campus de la American University en Washington, DC, pero no se popularizó hasta 2014. Abarca un espacio  cultural más amplio para crear conciencia sobre igualdad e inclusión de género.

Con respecto al español, que es un idioma de géneros, las palabras están asociadas con el femenino o masculino. Por ejemplo: una mujer latinoamericana es latina y un hombre latinoamericano es latino. Latinx aparece como una alternativa de género neutro o no binario.

De acuerdo con un estudio hecho por Pew Research Center en diciembre del 2019, solo 23% de adultos de los Estados Unidos se identifican como latinx pero sólo un 3% actualmente lo usa para describirse.

Si bien muchos ven la etiqueta como inclusiva, la palabra también tiene detractores. Los críticos han sugerido que es un término «americanizado». También consideran que la palabra crea distancia entre los estadounidenses y las personas en América Latina que para nada la usan.

Últimas Noticias