Cuando este jueves finalizó el empate sin goles entre El Salvador y Estados Unidos por la clasificación al Mundial Catar 2022, un intercambio de camisetas acaparó la atención de los seguidores del encuentro. El apellido Roldán acompañaba el dorsal de los jugadores involucrados, en una escena poco vista.
Los hermanos Alex y Christian formaron parte del encuentro; sin embargo, mientras el primero vio acción por los centroamericanos, el segundo jugó con el uniforme del equipo de las barras y las estrellas.
Poco más de 12 minutos coincidieron los jugadores del Seattle Sounders sobre el gramado del Estadio Cuscatlán de San Salvador, escenario del empate entre salvadoreños y estadounidenses; no obstante, fue tiempo suficiente para que la familia Roldán disfrutara de una histórica jornada.
Dos selecciones para un mismo apellido
Lo del jueves entre los Roldán fue anecdótico, pero no único. Numerosos casos de hermanos que juegan en distintas selecciones alimentan los libros de historia del balompié, algunos casos con mayor prominencia que otros.
En la región dicen presente los gemelos Rogelio y Ramiro Funes Mori, ambos de origen argentino. Mientras uno ve acción con la selección mexicana, el otro ha vestido los colores de la albiceleste.
El caso de Thiago y Rafinha Alcántara mide a dos piezas que conforman convocatorias de campeones mundiales. El primero, actualmente militante del Liverpool inglés, es parte del seleccionado español. El segundo, exBarcelona, ha dicho presente con Brasil.
Un reciente campeón del mundo, el francés Paul Pogba, ha ganado casi todo entre clubes y su país, caso contrario al de sus hermanos, Florentin y Mathias, quienes prefirieron optar por la selección de Guinea para contar con más posibilidades.