El fiscal general Merrick Garland dijo el lunes que el Departamento de Justicia reforzaría sus políticas para obtener los registros de los legisladores y prometió una «estricta responsabilidad» para los funcionarios que permitan que la política afecte su trabajo, emitiendo una extensa declaración en medio de una creciente controversia sobre los esfuerzos del departamento durante la administración Trump para obtener los datos de miembros del Congreso, periodistas e incluso del abogado de la Casa Blanca.
Garland dijo en el comunicado que había ordenado a su vicefiscal general Lisa Monaco que «evaluara y fortaleciera las políticas y procedimientos existentes en el departamento para obtener registros del poder legislativo», y señaló que ella «ya estaba trabajando para sacar a la luz asuntos potencialmente problemáticos que merecen revisión de alto nivel».
«Como dije durante mi audiencia de confirmación, las consideraciones políticas o de otra índole inapropiadas no deben desempeñar ningún papel en ninguna decisión de investigación o fiscal», dijo Garland en el comunicado. “Estos principios, que durante mucho tiempo han sido considerados sacrosantos por la fuerza laboral del Departamento de Justicia, serán vigilados enérgicamente bajo mi supervisión, y cualquier incumplimiento de ellos será cumplido con una estricta responsabilidad. Hay preguntas importantes que deben resolverse en relación con un esfuerzo del departamento para obtener registros relacionados con los miembros del Congreso y el personal del Congreso».
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Registro confiscado en secreto
En las últimas semanas, el Departamento ha notificado a los reporteros actuales y anteriores del Washington Post, CNN y New York Times que sus registros telefónicos y de correo electrónico habían sido confiscados en secreto como parte de los movimientos que comenzaron en la administración Trump.
Las medidas, que se produjeron durante los esfuerzos por investigar filtraciones de información clasificada, provocaron protestas entre los defensores de la Primera Enmienda y los ejecutivos de los medios, y desde entonces el presidente Biden y Garland han prometido dejar de perseguir los registros de los reporteros en tales casos. Los líderes de las tres organizaciones se reunirán con Garland el lunes para discutir el asunto.
The Washington Post. Traducción libre por El Tiempo Latino
