Autoridades locales en todo el país han endurecido las restricciones sociales por la pandemia del COVID-19 pasado el fin de semana largo por el feriado de Acción de Gracias. Temen un repunte de contagios debido a las reuniones entre familiares.
Los 10 millones de habitantes del condado de Los Ángeles recibieron la orden de permanecer en casa, mientras que en el condado de Santa Clara se restringieron los deportes escolares y profesionales y se ordenó una cuarentena para quienes se alejaron más de 150 millas de la jurisdicción, reseñó la agencia AP.
“Hay banderas rojas en materia de trayectoria en todas nuestras proyecciones de crecimiento (…) Si estas tendencias se prolongan, tendremos que tomar medidas mucho más dramáticas, diría que drásticas”, advirtió el gobernador de California, Gavin Newsom.
En Nueva Jersey se suspendieron todos los deportes juveniles. Previo a Acción de Gracias, los especialistas exhortaron a los estadounidenses a limitar los encuentros a su círculo de convivencia.
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Solo el domingo se maneja una cifra de 1,2 millones de viajeros en los aeropuertos de Estados Unidos, el mayor número desde marzo, mientras que otros residentes tomaron vías terrestres.
En ese contexto se les pide a los viajeros estar atentos a posibles síntomas de COVID-19 y, en caso de presentarlos, tomar una prueba de despistaje. De acuerdo con la agencia AP ya hay familias sufriendo las consecuencias de la exposición al COVID-19.
Con información de AP.
