El Departamento de Seguridad Pública y Servicios Correccionales de Maryland, confirmó este lunes la muerte de un preso por COVID-19, primer recluso que fallece por esta pandemia.
Según informes, un individuo encarcelado de aproximadamente 60 años, con afecciones médicas subyacentes graves, murió el pasado sábado. Estuvo hospitalizado durante varias semanas.
El hombre estuvo recluido en la Institución Correccional de Jessup, que hasta la fecha tiene el mayor número de infecciones entre los reclusos y los oficiales correccionales por igual.
El departamento reportó 93 casos positivos entre individuos que interactúan con su sistema.
Esto incluye 18 reclusos, 47 oficiales correccionales, 22 trabajadores contratados y seis empleados del departamento.
Una coalición de organizaciones de derechos de los prisioneros, incluido el Justice Policy Institute y la ACLU de Maryland, publicó una lista de demandas enviadas al gobernador Hogan, la semana pasada que dicen que podrían disminuir el impacto de la pandemia en las instalaciones de detención de Maryland.
Por lo pronto, el departamento suspendió temporalmente sus visitas a prisioneros a principios de marzo en un intento por proteger a los reclusos y al personal de un posible brote viral.
