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Miles de personas huyen de los pueblos costeros de Australia por los incendios forestales

Un buque de transporte de tropas de la marina australiana se preparaba para evacuar hasta 4 mil personas que se encuentran atrapadas en una región remota del estado de Victoria, luego de que siguieran avanzando los incendios forestales en Australia.

La situación en Mallacoota – un pueblo popular entre las familias durante la temporada de fiestas – es tan grave que los funcionarios pasaron la tarde del jueves evaluando quién sería capaz de subir las escaleras de las pequeñas embarcaciones a un barco de la marina anclado en la costa, diseñado para llevar 300 soldados y 23 tanques.

Aquellos que no puedan subir las escaleras y deseen irse del lugar serán sacados en helicóptero, aunque las autoridades informan que el intenso humo hace que volar sea peligroso.

Estos incendios han dejado un saldo de 17 personas fallecidas, ocho de ellas de esta semana. Según indican las autoridades, otras 17 están desaparecidas y más de mil casas y edificios han sido destruidos.

En el sudeste del continente arden más de 200 incendios y los bomberos temen que lo peor esté por venir. Para el sábado el pronóstico indica temperaturas superiores a los 100 grados, con vientos fuertes, lo que podría provocar que nuevo incendios se produzcan y otros se extiendan a una distancia de hasta siete millas del frente principal.

En Mallacoota, las familias lloraron y se abrazaron este jueves mientras discutían si aceptar la oferta de evacuación o esperar con sus autos y pertenencias a que los incendios se extinguieran, lo que podría llevar semanas.

Más al norte, en el estado de Nueva Gales del Sur, la principal autopista costera quedó bloqueada cuando un incendio que había estado bajo control estalló entre los centros regionales de Nowra y Ulladulla.

En un día despejado, el humo redujo la visibilidad en la carretera a seis pies en algunos lugares, lo que hizo que la circulación de los bomberos fuera muy peligrosa. Tres han muerto en accidentes de carretera en las últimas semanas.

Traducción libre de The Washington Post