Sporting Kansas City superó de manera contundente 4-2 al New England Revolution en el Sporting Park. La victoria le permitió a los azules colocarse en la cuarta posición de la Conferencia del Oeste.
La emotiva primera mitad nos trajo goles, voltereta y hasta polémica incluida.
Apenas al segundo minuto de juego, Diego Fagúndez mandó un cabezazo al palo, aunque el abanderado de forma errónea le marcó posición adelantada al joven uruguayo.
El protagonista del partido, por lo menos en los primeros 45 minutos, fue el mediocampista estadounidense Benny Feilhaber, quien participó en dos de los goles de su equipo, y también el del rival.
Fue Feilhaber quien le entregó a Kelyn Rowe el balón en la salida del Sporting al minuto 11. Rowe metió un pase filtrado de 20 metros para que Juan Agudelo se luciera con una faena Kevin Ellis, aguantara la presión de Matt Besler en su espalda, y definiera tranquilamente aun cuando ya tenía al arquero Tim Melia encima.
Sporting se apoderó del trámite del partido y tuvo varias llegadas claras para empatarlo, incluidas un par de asistencias de Feilhaber que Dom Dwyer no pudo mandar a la red para lavar el error de su compañero.
El inminente empate del Sporting llegó al minuto 28, con la combinación entre Krisztian Németh y Dwyer en forma de golazo. El dorsal 9 de KC mandó un servicio a media altura a donde se encontraba Dwyer de espaldas al marco y con Jermaine Jones pegado a él. El goleador del Sporting controló con el pecho, el balón se elevó y de media vuelta sin dejar caer el esférico, Dwyer emparejó los cartones.
Los Revs quisieron reaccionar, pero la inercia de los locales fue contundente.
Feilhaber comenzó su redención con un servicio de tiro de castigo a primer poste cuando nos aproximábamos al minuto 40, a donde llegó el húngaro Németh para meter un cabezazo y firmar el tanto de la voltereta. Su festejo nos hizo recordar a una ex estrella mexicana que jugara en el Chicago Fire.
El final de la primera mitad nos trajo la jugada polémica que hizo enfurecer al técnico Jay Heaps y que los jugadores de New England no comprendían. Dwyer controló el balón en el área con la marca pegajosa de José Gonçalves. La jugada provocó un contacto físico entre los dos jugadores, el cual el árbitro considero suficiente para marcar la pena máxima en contra de los visitantes. Feilhaber se encargó de convertirlo en el tercero de su equipo desde el manchón penal.
El inicio de la segunda mitad agarró dormida a la defensa del Revolution, y sobre todo a Kevin Alston quien dejó a Jacob Peterson ganarle la posición y el balón tras un servicio dividido. Peterson le sirvió a Németh quien entraba solo al área por el costado izquierdo, el húngaro definió cruzado ante Brad Knighton para convertir su doblete.
A pesar de que el marcador ya era de goleada y la oportunidad de tomar el liderato de la Conferencia Este se desvanecía, los Revs mostraron orgullo y lograron recortar por conducto de Scott Caldwell tras un esfuerzo de Charlie Davis por llegar a un balón largo y mandar una diagonal retrasada.
Ambos tuvieron chances de marcar más goles pero el marcador ya no se movió.
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