El británico Lewis Hamilton intentará dar este fin de semana un golpe decisivo al campeonato del mundo de Fórmula 1 en el Gran Premio de Brasil, donde irá en busca de un sexto triunfo consecutivo que lo deje a un paso del título.
A falta de dos carreras para el final de la temporada, Hamilton lleva una importante ventaja 24 puntos sobre su compañero de Mercedes, el alemán Nico Rosberg, el único perseguidor que aún puede darle caza.
Hamilton y Rosberg fueron los grandes dominadores de la temporada, pero el británico, después de vencer en las últimas cinco carreras, parece lanzado hacia su segundo título tras el campeonato que logró en 2008 con McLaren.
«Quiero ganar también en Brasil», anunció Hamilton de cara a la carrera en el circuito paulista de Interlagos.
El Gran Premio brasileño será decisivo, pero pase lo que pase el título se definirá en Abu Dabi el 23 de noviembre, ya que la última carrera otorgará por primera vez el doble de puntos.
Así, aún cuando Rosberg no sumase ningún punto en el autódromo José Carlos Pace y Hamilton lograse la victoria, el alemán tendría aún posibilidades en los Emiratos Árabes Unidos.
«Es fantástico tener aún una última oportunidad en la última carrera», afirmó Rosberg.
El circuito de Interlagos es, sin embargo, un escenario que trae especiales recuerdos a Hamilton, quien conquistó allí el título hace seis años en un final antológico.
«Fue un momento que quedará en mí para toda la vida», recordó el británico, que consiguió en la última curva de la última vuelta el quinto puesto que necesitaba para arrebatarle el título al brasileño Felipe Massa.
Hamilton recordó de todas formas que, «en términos de resultados» su récord «no ha sido el mejor hasta ahora en Interlagos», pero se mostró optimista en cambiar la tendencia el domingo.
Rosberg, que está por primera vez en su carrera luchando por el título, confía aún en sus posibilidades.
«Todo puede cambiar aún», advirtió el alemán, que finalizó segundo por detrás de Hamilton el último fin de semana en Austin pese a haber logrado la «pole».
«Intento lograr la ‘pole’ y ganar. Eso es todo», resumió su objetivo el alemán, que no gana un Gran Premio desde que venció en su país el 20 de julio. «Lo voy a dar absolutamente todo hasta la bandera a cuadros de Abu Dabi».
Con un gran estado de forma, una confianza mayúscula y una ventaja de 24 puntos, Hamilton parece tener todo de cara. Pero él mismo sabe que todo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos.
Hace seis Grandes Premios, el británico abandonó en Bélgica tras un toque con Rosberg y el alemán amplió su ventaja como líder a 29 puntos. Pero desde entonces, Hamilton dominó cada carrera y asaltó el primer puesto de la clasificación.
«Hasta ahora no tomé riesgos innecesarios. Siempre hice lo que tenía que hacer, del modo más seguro y limpio», aseguró Hamilton, que dijo que la ventaja de 24 puntos no cambia nada.
«Eso es así también para Nico, vamos los dos en busca de los puntos», añadió el líder del campeonato.
El jefe de deportes de motor de Mercedes, Toto Wolff, mantiene la prudencia antes de la penúltima batalla. «Ambos son muy fuertes mentalmente y ninguno tiene una ventaja psicológica».
Sobre el asfalto brasileño no estarán las escuderías Caterham y Marussia, que entraron en suspensión de pagos y ya renunciaron a correr el Gran Premio de Estados Unidos hace una semana.
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