Ya llegó el otoño: las noches se alargan, los días se acortan y el clima se enfría. En otras palabras, el invierno se acerca. Contrariamente a lo que mucha gente piensa, los jardineros profesionales o aficionados saben que esta es la época para preparar las plantas para el invierno y para la primavera próxima.
Por ejemplo, esta es una época muy buena para plantar y trasplantar porque la tierra aun está caliente del verano y tiene suficiente humedad gracias a las lluvias frecuentes. Piense que todavía tiene la última oportunidad de poner algo de color en el jardín antes del invierno, por ejemplo ¿Sabía usted que durante el otoño y antes de la primera helada del suelo, es el momento de plantación ideal para las rosas?
No se olvide que los bulbos de tulipanes también se plantan en el otoño para que sus flores germinen de la tierra en el momento justo de la primavera y le regalen entonces su derroche de color. Es esencial recordar que su ubicación es importante para que puedan prosperar y florecer. A la mayoría de estas plantas les gusta la tierra fresca y húmeda en primavera y conviene plantarlas en esta época a una profundidad de dos o tres veces su altura. Luego de hacer el hoyo lo suficientemente grande y hondo, coloque los bulbos en la tierra siempre con su punta mirando hacia arriba, cúbralos con la tierra que haya sacado y empuje hacia abajo. Déjelos dormir hasta que lo despierten con su arcoíris de colores al llegar la primavera.
También en esta época es importante recortar los arbustos amarillentos ya que eso denota que están devolviendo la savia a sus raíces y si no se recortan, pueden debilitarse. Los arbustos pueden recortarse aproximadamente una cuarta parte de su tamaño. No obstante como esto puede variar, si tiene alguna duda es recomendable que busque mas información en alguna jardinería local.
Igualmente, conviene podar los setos por última vez en otoño para evitar que se debiliten si se acumula la humedad. Pode los setos de todas sus hojas secas y retire todas las hojas de árboles que hayan caído sobre el seto, en caso contrario, no recibirá suficiente aire fresco ni sol y podrían pudrirse.
Como durante el invierno tanto la humedad como las bajas temperaturas y la debilidad del sol afectan al césped, este necesita cuidados antes de que empiece la estación fría. Las hojas caídas en otoño deben ser retiradas totalmente y de forma regular ya que de lo contrario, las hojas que se dejen sobre el césped lo privarán de luz lo cual dañará su verdor y favorecerán la formación de manchas secas y parduscas.
Como verán hay mucho trabajo por delante antes de que llegue el invierno, apúrese para que no se arrepienta al llegar la primavera.