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¿Nos creería si le decimos que se puede nadar en el Charles River?

El pasado sábado 13 de julio, alrededor de dos docenas de personas nadaron en el Charles River por primera vez en más de 50 años. Anteriormente, el Charles River estaba limitado a vehículos marinos, ya que su agua estaba altamente contaminada. Desde entonces, todos los bostonianos sabían que nadar en el Charles River era muy peligroso, pues los contaminantes que se encontraban en el agua podían causar muchos daños a la salud de los nadadores.

En declaraciones recogidas por el Boston Globe, varios nadadores comentaron cosas como: “Está tibia†o “se siente muy bienâ€. Con una temperatura de 78 grados, el agua se encontraba muy agradable para nadar. Una nadadora comentó: “el agua está anaranjadaâ€, al notar que cambiaba de color según aumentaba la profundidad. Un hombre sentado en el muelle dijo que el agua parecía caldo de res.

En el 1995, el agua de Charles River recibió una calificación grado D por la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés); no obstante, en 2011 ya había recibido la calificación estándar, y subió a grado B. Esto permite que el público pueda disfrutar del agua sin arriesgar su salud.

Sin embargo, se les pide a los nadadores que entren y salgan del agua sin tocar el fondo para que no se expongan a los tóxicos que se encuentran acumulados en el suelo del río.

A pesar de que hace 8 años el Charles River Swim Club llevó a cabo una carrera de una milla para nadadores profesionales, el sábado fue la primera vez que se permitió que los bostonianos nadaran en el Charles River recreativamente. Por dos horas, 24 personas pudieron disfrutar del agua mientras cuatro salvavidas, dos en kayaks y dos en el muelle, velaban por su seguridad.

Renata von Tscharner, fundadora del Charles River Conservancy, también disfrutó del agua al haber alcanzado su meta: invitar a los bostonianos a nadar en las aguas limpias del Charles River.