Los principales sindicatos y organizaciones empresariales de Estados Unidos alcanzaron este fin de semana un acuerdo para crear un nuevo programa de trabajadores extranjeros temporales. El pacto se ha producido dentro de las negociaciones para la reforma de inmigración, que culminaría con la regularización de 11 millones de indocumentados, y está considerado como una de las claves para que ésta salga adelante.
“Este asunto siempre ha roto cualquier consenso entorno a la reforma de inmigraciónâ€, reconoció el demócrata Charles Schumer, uno de senadores que negocian la nueva legislación. “Pero eso no ocurrirá esta vezâ€. Schumer forma parte del conocido como “Grupo de los Ocho†senadores -cuatro demócratas y cuatro republicanos- que desde el pasado mes de enero lideran conversaciones con diversos sectores de la sociedad para acometer la reforma.
El pacto entre sindicatos y empresarios, inalcanzable en anteriores intentos de cambiar el sistema migratorio, supone la creación de un programa para trabajadores temporales con condiciones nunca antes acordadas en EE UU. El nuevo visado -tipo “Wâ€-, permitiría a los inmigrantes trabajar en el país y, al cabo de un año, solicitar un permiso para permanecer de manera legal dentro de sus fronteras. Los trabajadores temporales podrían además cambiar de empleo, algo imposible en la actualidad.
Con el nuevo acuerdo alcanzado el sábado, un nuevo programa de visitas “W†entraría en vigencia el 1 de abril de 2015, según un documento difundido por la AFL-CIO, y permitiría el ingreso de 20 mil trabajadores en el primer año, de 35 mil en el segundo, 55 mil en el tercero y 75 mil en el cuarto.
En última instancia, el límite sería de 200 mil trabajadores anuales, pero el número de visas oscilaría en función de la tasa de desempleo, la generación de plazas laborales, la demanda de los empleadores y la información recogida por una nueva oficina federal promovida por el movimiento laboral como un observador objetivo del mercado.