Se esperarán gastos más altos de lo normal este invierno para aquellos que calientan sus casas con petróleo, según un reporte del gobierno. La causa será una combinación del aumento de precio del petróleo y el pronóstico del regreso de las temperaturas frías típicas de los inviernos del Noreste. Debemos recordar que el invierno 2011-2012 fue relativamente calmado y trajo temperaturas inusualmente altas.
El pronóstico para la temporada de invierno de 2012- 2013 es que será 18% más frío que el invierno pasado, según un reportaje hecho por la Administración de Información de Energía (EIA).
Por lo tanto, esto hará que tanto usuarios de petróleo como aquellos que usan gas natural, encuentren precios más altos si es que pretenden mantener sus hogares climatizados. En combinación con el clima más frío, el aumento de precios hará que “calentar†este invierno cueste $400 más de lo que una familia promedio tuvo que invertir el invierno pasado para mantener la casa caliente.
El Planeta salió a la calle y encontró que hay algunos residentes que, a pesar del aumento, prefieren mantener sus casas calientes y no disminuir el uso de la calefacción. Varias personas mencionaron tener un arreglo con las compañías proveedoras de energía para pagar la totalidad de la cuenta de la temporada fría en cuotas mensuales, una opción que podría ayudar a balancear el presupuesto.
“El precio del combustible para calefacción está sujeto al precio mundial del crudo (petróleo). Estamos atados a eso. Los precios del gas natural son bajos pero también subirán. Es un poco como si el asunto precios estuviera fuera de nuestro control y por eso opino que lo mejor que los consumidores pueden hacer es programar su presupuestoâ€, dijo a El Planeta Michael Ferrante, presidente de Massachusetts Oil Heat Council. Ferrante también ofreció algunos conse jos sobre cómo mantener los costos de calefacción bajos a pesar del aumento de precio.
Hay cuatro cosas en particular que el experto recomienda hacer:
· Hablar con su compañía de calefacción para pagar su cuenta en cuotas.
· Bajar la temperatura de noche así no se usa tanta electricidad, gas o aceite.
· Usar un termostato automático, que de acuerdo a la temperatura se apaga o enciende para que se use la calefacción de forma más eficiente.
· Sellar ranuras, grietas y huecos en su casa para que no entre aire frío y que tampoco se escape el calor.