Esfuerzos para destituir al alcalde de lawrence William lantigua están en pie, otra vez.
Miembros del grupo Uniendo Lawrence dijeron estar más organizados que el primer movimiento y dispuestos a tomar más vigilancia en el proceso para asegurar que esta campaña sea exitosa.
«El alcalde no está calificado para el trabajo y necesitamos alguien que esté ahí no solo para recibir un cheque», dijo Josué Hernández, 24, uno de los líderes del grupo. «Gente como él se queda en el poder solo cuando nosotros nos quedamos callados. No necesitamos un dictador, necesitamos un modelo que guíe por su ejemplo».
Hernández dijo que Lantigua ha creado discordia en Lawrence y que varios sectores públicos están sufriendo por la falta de liderazgo.
Llamadas y correos electrónicos a Lantigua de parte de El Planeta pidiendo un comentario sobre las alegaciones en su contra no obtuvieron respuesta.
En una carta escrita en abril por el alcalde y dirigida a sus constituyentes, Lantigua dijo que siempre ha actuado con honestidad y respeto. La carta fue escrita en fechas que coincidían con el primer movimiento tratando de destituirlo y durante alegaciones de corrupción hechas en su contra.
En abril Lantigua agregó que los comentarios simplemente están tratando de desacreditarlo, y desacreditar la administración y la ciudad. «Yo no tengo nada que esconder», dijo en la carta de entonces.
Lantigua es el primer alcalde hispano elegido popularmente en Massachusetts.
Hernández, originario de Puerto Rico, dijo haberse mudado a Massachusetts cuando tenía alrededor de 3 ó 4 años de edad y que siempre ha considerado a Lawrence su hogar.
Él dijo estar liderando los esfuerzos en parte porque quiere que Lawrence sea un mejor lugar para la juventud, donde políticos sirvan como una fuerza positiva para la comunidad.
Hernández contó que cuando él era niño tomó varias decisiones que lo llevaron por el mal camino.
A los 13 años, participó en un intento de robo armado, dijo.
«Andaba con un grupo de gente mucho mayor que yo y me metía en problemas», dijo Hernández.
Cuando estaba en décimo grado, Hernández se salió permanentemente de la secundaria, señaló.
Hernández, padre de una niña de 8 años y un niño de 6 meses, dijo haber cambiado su vida positivamente, obteniendo un GED y abogando por la comunidad de Lawrence.
Junto a Hernández organizando la destitución de Lantigua está Wayne Hayes, 56, quien dijo ser un residente de Lawrence por más de una década.
Él dijo haber tomado parte de la destitución porque quiere demostrar que la comunidad anglosajona está trabajando en unión con la comunidad hispana, y que este esfuerzo es algo que la mayoría de los residentes de la ciudad quieren, sin importar la raza.
Hayes también dijo sentirse incómodo con el liderazgo de Lantigua, subrayando que el alcalde ha dividido el departamento de policía, alejado al departamento de bomberos, e interrumpido la seguridad de Lawrence.
«La manera en que él actúa es increíblemente negativa e insultante», dijo Hayes. «Lantigua no sabe solucionar problemas, más bien causa división en todas partes».
Los organizadores de «Uniting Lawrence» añadieron que esta vez verificarán todos los pasos con distintas agencias para asegurarse de que todo esté en regla y que no aparezcan atrasos de último minuto. También dijeron que recaudarán firmas cerca de lugares de votación el 8 de noviembre para asegurarse de que quienes firmen la petición sean votantes registrados.
«Uniting Lawrence» necesita recolectar firmas del 15% de los votantes registrados en las elecciones previas. En este caso, se necesitan 5,232 firmas.
George Richardson, 46, periodista investigador, comentó estar siguiendo las acusaciones a Lantigua muy de cerca, y que el movimiento de destitución anterior costó miles de dólares a la ciudad, ya que se necesitó pagar a empleados para que trabajaran horas extra para contar la