Este lunes por la noche los Patriotas de nueva inglaterra empiezan la nueva temporada de futbol americano enfrentando a los delfines de Miami en el juego de lunes por la noche (Monday Night Football).
Un inicio que pondrá a prueba lo hecho en meses de arduo trabajo y cambios de personal que buscan hacer llegar al equipo de casa, en las mejor de las condiciones para enfrentar la dura temporada que ya empieza.
A continuación, un recuento de estos ajustes y de sus posibles repercusiones para este 2011.
CAMBIOS EN LA DEFENSA
La mayor deficiencia
Una de las mayores fallas de la defensa fue la falta de pass rushing, llámese así a la capacidad de una defensa de presionar al quarterback o mariscal de campo rival. Sin esta posibilidad de acoso, las ofensivas contrarias, con tiempo y tranquilidad, tienen poca dificultad de conectar sus pases a profundidad. Ese error del equipo local fue bien aprovechada por Mark Sanchez y los Jets en el partido de los playoffs.
Cambios radicales
Para subsanar el déficit mostrado en la temporada anterior, este 2011, Belichick parece haber dado un drástico giro en su filosofía defensiva. La tan usada formación 3-4 (3 hombres en la primera línea de defensa y 4 apoyadores o linebackers), es reemplazada por la formación defensiva 4-3. Un cambio de filosofía que tiene más que ver con la clase de jugadores disponibles en la agencia libre que con convicciones propias.
llegan las moles humanas
El inicio de los campos de entrenamiento trajo consigo grandes sorpresas. Primeramente Belichick sorprende a todos contratando al mejor liniero defensivo disponible, Albert Haynesworth, una pared humana capaz de desmantelar la más férrea de las ofensivas. Haynesworth, jugando al lado del patriótico Vince Wilfork, conformarán una de las murallas más impenetrables de la liga. Es la presencia de Haynesworth lo que «obliga» al entrenador a cambiar su filosofía defensiva para adaptarse al talento del jugador.
Pero Belichick no se detiene allí. A comienzos de agosto adquiere los servicios de las alas defensivas Mark Anderson, Shaun Ellis y Andre Carter, tres alas defensivas con el mismo apetito destructor de Wilfork y Haynesworth.
Resto de la defensa
Esta nueva filosofía defensiva le dará mayor flexibilidad a los apoyadores como Jerod Mayo, quien tendrá más campo de acción y mayor libertad para ir a la caza de los rivales.
Para cerrar, la secundaria también ha sufrido algunas modificaciones. Las esquinas traen de regreso a Devin McCourty y un recuperado Leigh Bodden, pero en el medio de la secundaria Belichick apuesta por los seguros Patrick Chung y probablemente Sergio Brown.
Una zona de la defensa que vio la abrupta partida de dos jugadores de renombre, James Sanders y Brandon Meriweather, ambos dados de baja por Belichick recientemente.
CAMBIOS EN LA OFENSIVA
Poderío aéreo
Uno de los mayores problemas de la pasada temporada fue la falta de un arma aérea profunda para Tom Brady. EL gran mariscal logró un récord 14-2 en base a pases cortos y jugadas bien elaboradas pero desde la partida de Randy Moss, no había habido nadie que genere respeto en el juego profundo. Un punto débil que tenía que corregirse este año.
Chad Ochocinco
Se sabía del interés de Ochocinco de venir a ponerse a órdenes de Belichick, pero se ponía en duda que este deseo fuera retribuido.
A pesar del talento de Ochocinco, su manera extrovertida y poco prudente de actuar no iba acorde con la discreción y disciplina que demanda Belichick de sus jugadores. Pero, para deleite de Brady, el enigmático entrenador nos sorprende contratando a Ochocinco. El talento de Ochocinco «abrirá» el campo con su juego a profundidad dándole a su vez nuevas opciones a la ofensiva de Brady, lo que constituye una situación en la que toda la ofensiva saldrá benefi