Por Alicia Chang/ AP
El fuerte terremoto que sacudió Chile ha atraído nueva atención hacia una falla submarina a lo largo del Norte del Pacífico norteamericano que pudiera causar el mismo mega sismo e infligir considerables daños en ciudades como Seattle, Portland y Vancouver. La falla ha estado inactiva durante más de 300 años, pero cuando se despierte — mañana o en unas décadas — las consecuencias pudieran ser devastadoras.
La última ruptura desató el mayor terremoto conocido que se haya registrado en los 48 estados norteamericanos contiguos: un sismo de magnitud 9 que envió enormes olas de tsunami contra las costas japonesas.
Recientes simulaciones en computadoras de un sismo hipotético de magnitud 9 encontraron que los temblores pudieran durar entre 2 y 5 minutos, lo suficiente como para causar el derrumbe de edificios pobremente construidos desde Columbia Británica hasta el norte de California y dañar severamente carreteras y puentes.
Un terremoto así causaría además olas poderosas en cuestión de minutos. Mientras que ciudades grandes como Portland y Seattle estarían protegidas de graves inundaciones, comunidades costeras bajas no serían tan afortunadas.
El área «tiene una larga historia geológica de hacer exactamente lo ocurrido en Chile», dijo Brian Atwater, un geólogo que trabaja para el Servicio Geológico de Estados Unidos y la Universidad de Washington. «No es cuestión de si pasará, sino de cuándo pasará».
La falla Cascadia se comporta muy similarmente a la de Nazca, frente a las costas de Chile, que desató un terremoto de 8.8 que duró 2 minutos y medio y destruyó medio millón de viviendas.
Existe 80% de probabilidades de que una porción de la falla frente al sur de Oregón y el norte de California se romperá en los próximos 50 años y producirá un súper terremoto.
Las probabilidades son menores — 27% — para el borde norte, que incluye el estado de Washington y la Isla Vancouver.