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¿Inglés sin barreras?

Por Ignacio Laguarda

El aprendizaje de inglés de los estudiantes inmigrantes en Boston ha sufrido por una crisis en los últimos 6 años, según líderes comunitarios y educadores locales.

Desde el año 2003, cuando se implementó una ley en Massachusetts denominada Inmersión en Inglés (o Structured English Immersion, SEI) – que delinea que los estudiantes con poco conocimiento de inglés aprendan el idioma sin el uso de su lengua principal – han aumentado los índices de deserción escolar de los estudiantes inmigrantes y ha subido la inscripción de estos estudiantes en clases de Educación Especial, que sirven mayormente a estudiantes con discapacidades, según estudios del Instituto Mauricio Gastón de la Universidad de Massachusetts en Boston.

Bajo ese telón de fondo, el Sistema Escolar Público de Boston (BPS, por sus siglas en inglés) creó un nuevo comité de 16 miembros el pasado 5 de noviembre para atacar el tema de los Estudiantes de Aprendizaje del Inglés (ELL, por sus siglas en inglés) e intentar revertir la situación. Dentro del sistema escolar de Boston, hay más de 10,000 estudiantes que no dominan el inglés.

«Tenemos que producir un programa riguroso para estos estudiantes», dijo Eileen de los Reyes, Superintendente Asistente del BPS, quien trabajará de cerca con el nuevo comité. «Existe un compromiso del distrito en revisar los programas y a revisar la enseñanza de estos estudiantes».

EDUCACIûN BILINGE: UNA VÍCTIMA
La votación en 2002 por la ley SEI fue un tema controversial. Para Miren Uriarte, una de las autoras de los influyentes estudios del Instituto Mauricio Gastón sobre la situación escolar de los inmigrantes, se debió a un clima anti-inmigrante después de los ataques del 11 de septiembre.

«Los científicos políticos dicen que nunca se debe dar a votación los derechos de una minoría», dijo Uriarte. «Y eso fue lo que pasó con los derechos de oportunidad de aprendizaje».

Los programas resultantes de SEI se basan en sumergir al estudiante en clases de inglés y solamente usar el idioma nativo del estudiante en circunstancias especiales, a diferencia del sistema de transición que se utilizaba antes de 2003 y que se caracterizaba por el uso del idioma principal de los estudiantes en el aprendizaje del inglés.

La votación a favor de SEI hizo que Massachusetts fuera solamente uno de tres estados en el país que no permitiera la educación bilinge, dijo Uriarte. Esa realidad distaba mucho con la historia de Massachusetts como el primer estado en el país en pasar una ley ofreciendo educación bilinge en 1971 a causa de la masiva inmigración puertorriqueña en aquel entonces.

Durante los tres años después de la implementación de SEI en 2003, el porcentaje de estudiantes que abandonaron las clases se incrementó por casi el doble en las escuelas secundarias y por más del triple en las escuelas primarias para niños de 8 a 12 años, según estudios del Instituto Mauricio Gastón.

La cantidad de estos mismos estudiantes en clases de Educación Especial también incrementó de 15 a 19%, gracias a exámenes de inteligencia que solamente se ofrecieron en inglés, dijo Uriarte.

«No había exámenes en los idiomas nativos de los niños y no había personas que pudieran administrar esos exámenes que fueran bilinges en el idioma de los niños. Le están dando el examen que determina si califican para educación especial en un idioma que no entienden», dijo Uriarte. «Imagínate que tienes 13 años y llegas a Boston. Te hacen un examen y te meten en una clase de educación especial. ¿Cuánto tiempo vas a durar?» Para Uriarte, la falta de preparación educativa de los estudiantes inmigrantes se debe también a un miedo de