Este martes funcionarios del estado informaron que un veterano del Holyoke Soldiers’ Home, que se había recuperado de COVID-19 dio nuevamente positivo al virus, marcando el primer resurgimiento en las instalaciones en más de un mes.
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El residente, según las autoridades del centro, comenzó a mostrar síntomas este lunes, por lo que tuvo que ser transferido a un hospital local donde se le practicó el test, al que dio positivo. Luego de conocerse este resultado fueron suspendidas las visitas a la instalación y los funcionarios se encuentran realizando lo que llamaron «pruebas a casa completa».
El veterano residía en una unidad en la que se habían recuperado clínicamente de COVID-19.
Brooke Karanovich, quien es portavoz de la Oficina de Salud y Servicios Humanos del estado informó que los residentes compañeros del veterano se encuentran ahora cumpliendo una cuarentena y esperan los números de contagios no se eleven. Hasta el momento se desconoce el número de veteranos que residen allí.
«El hogar ha estado implementando protocolos para los individuos recuperados clínicamente, que pueden dar positivo incluso después de estar clínicamente recuperados», dijo Karanovich en una declaración. «El Hogar está tomando inmediatamente las precauciones necesarias» para evitar un nuevo brote.
Recordemos que el hogar de ancianos fue el escenario de uno de los peores brotes de coronavirus del estado y del país. En él murieron al menos 76 residentes de edad avanzada, y enfermaron más de una docena de trabajadores. Un informe publicado por el estado encontró que los antiguos líderes del hogar habían incurrido en errores «totalmente desconcertantes» al momento de combatir el brote de coronavirus en sus instalaciones.
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Los errores incluyeron: “la decisión de fusionar dos unidades de demencia cerradas a finales de marzo, creando lo que el informe denominó condiciones deplorables para 40 veteranos”. Estas muertes provocaron que Bennett Walsh, el entonces superintendente de la instalación, fuera despedido.