Por Patrick Madden
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En una reciente noche de martes, en una iglesia episcopal de Canton, las últimas palabras de la Oración de la Serenidad quedaron en el aire cuando terminaba la reunión semanal de Jugadores Anónimos. Michael, quien dirige el grupo, se quedó unos momentos más. Dijo que el grupo de recuperación ha ido creciendo… y volviéndose más joven.
“Creo que hemos tenido 17 miembros nuevos en los últimos cinco meses”, dijo. “Y diría que al menos dos tercios de ellos tienen entre 20 y 30 años".
Según Michael, habían acudido en busca de ayuda debido a las apuestas deportivas en línea.
Massachusetts legalizó las apuestas deportivas en línea en 2023, uniéndose a una ola de estados que buscan nuevos ingresos fiscales. Ahora los residentes pueden apostar en casi cualquier juego, a cualquier hora, desde sus teléfonos.
“Tomemos uno de los comportamientos más adictivos de la humanidad y luego combinémoslo con uno de los dispositivos más adictivos de todos los tiempos”, dijo Michael. “Obviamente eso va a ser un desastre.”
(WBUR aceptó no usar los nombres completos de las personas en recuperación para esta nota debido a sus preocupaciones sobre el estigma de la adicción)
El aumento de nuevos asistentes —o “chicos”, como algunos de los miembros mayores del programa de 12 pasos los llaman— puede sentirse como una espada de doble filo.
“Piensas: ‘Genial, estos muchachos están enfrentando sus problemas desde temprano’”, dijo Michael. “Pero por otro lado, por cada chico que vemos, probablemente hay entre 20 y 100 que no están viniendo".

“Atrapado en mi teléfono”
WBUR habló con especialistas en adicciones de todo Massachusetts y entrevistó a jóvenes en recuperación, incluidos varios miembros de un grupo de Jugadores Anónimos en Canton.
Uno de esos hombres es Jason, de 26 años, quien lleva alrededor de seis meses en recuperación.
Dijo que comenzó a apostar en deportes cuando estaba en la universidad, con “bookies” en el campus.
“Siempre tuve amor y pasión por los deportes”, dijo. “Al principio era… era algo divertido".
Eso cambió hace casi tres años, después de que Massachusetts legalizara las apuestas deportivas para mayores de 21 años. De repente, podía apostar prácticamente en cualquier cosa —incluidos partidos en el extranjero. En el punto más alto de su adicción, Jason estimó que llegaba a hacer hasta 50 apuestas al día.
“Estaba atrapado en mi teléfono, mirando las líneas de apuestas o viendo este juego de baloncesto europeo”, recordó.
Además, los anuncios en la televisión y en las redes sociales de las grandes marcas nacionales —DraftKings, con sede en Boston, y su rival FanDuel— lo atraían aún más.
“Su objetivo es inundarte con eso, hasta que te sientes como asfixiado y estás pensando en ello todo el tiempo”, dijo.
Más allá de las pérdidas económicas, la adicción al juego le hizo perder la confianza de quienes estaban cerca de él, como sus padres.
“Destruye las relaciones, porque empiezas a mentir sobre para qué necesitas el dinero”, explicó. “Es algo muy difícil".
Desde que buscó ayuda, Jason dijo que ha logrado reconstruir esas relaciones.
Sigue viendo partidos en la televisión, pero ahora los anuncios de apuestas deportivas le molestan profundamente.
“¿Por qué no nos educan sobre los peligros que presentan las apuestas?” preguntó.
La avalancha de publicidad…
Después de que la Corte Suprema de EE. UU. abriera el camino para que los estados legalizaran las apuestas deportivas en 2018, empresas como DraftKings y FanDuel invirtieron cientos de millones de dólares en marketing.
Ofrecieron bonos de inscripción y contrataron a celebridades como el comediante Kevin Hart y a deportistas de renombre como el exjugador de los Patriots Rob Gronkowski para anuncios llamativos.
“Hubo una verdadera avalancha de publicidad que atraía especialmente a los jóvenes”, dijo Lia Nower, directora del Centro de Estudios sobre Juegos de Azar de la Rutgers University.
Ella dijo que el momento actual le recuerda a otra época.
“Las apuestas están donde estaban los cigarrillos en los años 40, cuando teníamos al Marlboro Man y a todas esas actrices con un cigarrillo en esos aparatos para alargarlo”, dijo Nower. “Ahora está glamurizado. La gente no entiende que esto es una adicción como cualquier otra".
Pero para las empresas —y para Massachusetts— el marketing dio resultado.
En octubre, el estado estableció un nuevo récord mensual en apuestas deportivas. Según la Comisión de Juegos del estado, las personas en Massachusetts apostaron $892 millones, un aumento del 20% respecto al mismo mes del año pasado. Casi todo se hizo en línea.
Massachusetts obtiene una parte de esas ganancias.
Los ingresos de las apuestas deportivas en línea se gravan con un 20%. Desde la legalización, el estado ha recaudado $350 millones de las siete empresas con licencia.
Un aumento en las solicitudes de ayuda
A diferencia de otras adicciones, el gobierno federal no lleva un registro de cuántas personas presentan problemas con el juego, y Massachusetts tampoco.
Pero hay señales de que, a medida que las apuestas deportivas han crecido en el estado, también lo han hecho los problemas de juego entre los adultos jóvenes.
El número de residentes de Massachusetts en sus 20 y 30 años que llamaron a la línea de ayuda del estado y fueron derivados a tratamiento más que se duplicó después de que se activaran las apuestas deportivas hace tres años, según datos del Departamento de Salud Pública obtenidos mediante solicitud de acceso a la información.
La línea telefónica, que aparece al final de los anuncios y en las apps de apuestas deportivas, conecta a quienes llaman con consejeros y programas de tratamiento.
Derivaciones a tratamiento desde la línea de ayuda sobre juego problemático de Massachusetts
Ha habido un aumento significativo en las derivaciones a tratamiento desde la Línea de Ayuda sobre Juego Problemático de Massachusetts desde que se legalizaron las apuestas deportivas en línea en 2023. Los datos presentados a continuación fueron recopilados en años fiscales que abarcan del 1 de julio al 30 de junio.

“Cualquier evidencia que muestre un aumento en la adicción es motivo de preocupación para la comisión”, dijo Eileen O’Brien, miembro de la Comisión de Juegos de Massachusetts, que regula las apuestas deportivas.
Los datos de la línea de ayuda incluyen todos los tipos de juego, no solo las apuestas deportivas. Sin embargo, los clínicos de tratamiento de adicciones que hablaron con WBUR dijeron que las apuestas deportivas en línea estaban provocando casi todos los casos que involucran a adultos jóvenes.
Kyle Faust, psicólogo clínico y director del Programa de Tratamiento de Adicciones Digitales y Juego del Hospital General de Massachusetts, dijo que ha visto un aumento en jóvenes con problemas de juego.
“Puede ser extremadamente grave”, afirmó Faust. “Una persona puede volverse más vulnerable a la depresión, a distintos tipos de trastornos de ansiedad. Y si alguien está profundamente endeudado, se siente atrapado, sin salida, completamente indefenso.”
Antes de las apps de apuestas, dijo, jugar requería más esfuerzo: manejar hasta un casino o viajar a Las Vegas.
“Mientras más fácil sea apostar”, añadió Faust, “más personas van a sufrir por esto".
“Acabo de apostar todos nuestros ahorros"
Adam, de 33 años, dijo que al principio intentó limitar sus apuestas. Vivía en Connecticut en 2021, cuando ese estado legalizó las apuestas deportivas. Más tarde se mudó a Massachusetts.
“De alguna manera me había convencido de que podía hacerlo con responsabilidad”, dijo. “Así que eso significaba apostar 10 dólares aquí o allá.”
Pero, explicó, “lo que pasa con esta adicción, o con cualquier otra, es que eso no es suficiente".
Con las aplicaciones de DraftKings y FanDuel en su teléfono, Adam podía apostar en varios juegos al mismo tiempo. Con el tiempo, sus apuestas se volvieron más frecuentes y arriesgadas, mientras intentaba recuperar el dinero perdido.
Cuando salía con su novia, se excusaba varias veces —a veces para ir al baño— solo para usar el teléfono.
“Lo que estaba haciendo era revisar los resultados y hacer más apuestas, cosas así”, dijo Adam. “Me quedaba despierto a todas horas de la noche, apostando en este deporte, en aquel, en deportes de otros países de los que no sabía nada".
Una noche de febrero de 2024, cuando las pérdidas ya se acumulaban, decidió apostar todo lo que le quedaba en un solo partido de los Bruins.
“Entré a nuestro dormitorio, donde ella estaba dormida, y la desperté”, dijo.
Boston había perdido.
Dijo: “Tengo algo que decirte… acabo de apostar todos nuestros ahorros.”
Adam contó a WBUR que “fue la peor noche de mi vida, tener que decir todo eso que había estado escondiendo por tanto tiempo.” Con el apoyo de su entonces novia, ahora esposa, Adam entró en tratamiento y ahora asiste a reuniones de Jugadores Anónimos todas las semanas.
“Pero mirando atrás, ese fue uno de los puntos de quiebre más importantes de mi vida”, dijo.
Adam aseguró que la vergüenza que rodea a la adicción al juego también forma parte del problema.
“Si hubiera sabido que iba a tener una esposa y una familia tan comprensivas, habría pedido ayuda antes”, dijo Adam.
Establecer límites
Las compañías de apuestas deportivas ofrecen herramientas diseñadas para proteger a las personas de desarrollar problemas con el juego. Sus aplicaciones permiten a los usuarios fijar límites de depósito. También pueden inscribirse en períodos de “enfriamiento” y en programas de autoexclusión para prohibirse a sí mismos apostar.
DraftKings ofreció una entrevista con Lori Kalani, su directora de juego responsable. Cuando se le preguntó cómo veía la empresa el aumento de trastornos de juego entre los jóvenes, destacó los esfuerzos de la compañía por promover sus herramientas de “juego responsable”.
“La gran mayoría de las personas que apuestan en deportes lo hace de manera responsable, como una forma de entretenimiento”, dijo Kalani. “Aunque entendemos y reconocemos que puede ser un problema para algunas personas. Apostar está bien, pero todos deberían hacerlo dentro de un límite que ellos mismos se establezcan".
Añadió que DraftKings tiene la capacidad de alertar a los clientes cuando detecta una actividad inusual, como apostar durante horas en plena madrugada.
“Reciben un mensaje que les avisa: ‘Oye, has estado en la aplicación durante varias horas. ¿Te gustaría establecer algunos límites sobre el tiempo que puedes pasar aquí?’”, explicó Kalani.
Kalani también dijo que todos los anuncios de apuestas deportivas incluyen una línea de ayuda, como exige la ley estatal.
FanDuel dijo en un comunicado que “reconocemos que hay clientes que pueden estar en riesgo de sufrir daños por el juego y trabajamos para conectar rápidamente a esos clientes con recursos”, incluyendo una evaluación gratuita de salud mental. La empresa señaló que interpreta el aumento en el uso de recursos como las líneas de ayuda sobre juego como una señal de mayor conciencia sobre el apoyo disponible.
Expertos en salud pública dijeron que herramientas como los límites de apuestas y los programas de autoexclusión pueden ayudar a algunos clientes, pero no son suficientes, especialmente para los jóvenes cuyos cerebros aún están en desarrollo y están aprendiendo a manejar el riesgo y el dinero.
Nower, de la Universidad Rutgers, dijo que sus investigaciones sobre apuestas deportivas en Nueva Jersey encontraron que una proporción muy pequeña de apostadores en sus primeros 20 años utiliza estas funciones de seguridad.
“Lo que sabemos después de todos nuestros años de investigación es esto: cuanto antes una persona entra en contacto con el juego, cuanto más frecuentemente apuesta y en más actividades participa, mayor es su riesgo”, dijo Nower.
Y en Massachusetts, el problema no se limita a los adultos jóvenes. Hay evidencia de que las apuestas deportivas están llegando a niños que aún no tienen edad legal para jugar.
En una audiencia en la Casa del Estado sobre legislación de juego el mes pasado, Andrea Freeman, del Instituto de Salud Pública del Oeste de Massachusetts, presentó hallazgos alarmantes de una encuesta sobre conductas juveniles en Springfield.
“En 2024, casi el 30% de los estudiantes de octavo grado encuestados informó que había participado en apuestas deportivas en el último año”, dijo a los legisladores.
“Tomemos uno de los comportamientos más adictivos de la humanidad y luego combínelo con uno de los dispositivos más adictivos de todos los tiempos. Obviamente eso va a ser un desastre", dijo Michael.
La definición usada en la encuesta era amplia, e incluía deportes de fantasía y apuestas con amigos, con o sin dinero. Pero Freeman la calificó como un aumento “significativo” respecto a 2019, antes de que las apuestas deportivas se lanzaran en el estado.
Algunos legisladores dijeron lamentar lo que las apuestas deportivas en línea habían desatado entre los residentes.
“Cuando voté a favor de legalizar las apuestas deportivas, nunca pensé que se convertiría en lo que es hoy”, dijo el senador estatal John Keenan en la audiencia de noviembre.
Keenan, demócrata de Quincy que anteriormente apoyó la legalización, ha presentado una propuesta de ley que endurecería las restricciones sobre las apuestas deportivas y sobre cómo se promocionan —incluida una posible prohibición de anuncios de apuestas durante transmisiones de partidos. El proyecto podría someterse a votación el próximo año.
Durante la audiencia, mostró arrepentimiento.
“Quiero pedir disculpas a quienes se encuentran en los espacios oscuros de la adicción al juego y a quienes están en proceso de recuperación”.