Por Doug Banks
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Nunca desde el pico de la pandemia de COVID-19 la confianza empresarial en Massachusetts había estado tan baja durante tanto tiempo.
Las interrupciones causadas por el cierre del gobierno federal, el aumento de costos y precios, y la incertidumbre continua sobre los aranceles provocaron una caída en el optimismo de los empleadores por segundo mes consecutivo y una desplome de nueve puntos respecto al año anterior, según el último Índice de Confianza Empresarial de AIM.
El índice —un barómetro mensual que refleja cómo los empleadores ven las perspectivas económicas del estado— se mantuvo ocho meses consecutivos por debajo de 50, el punto que separa el optimismo del pesimismo, según funcionarios de AIM. La organización indicó que la última vez que el índice estuvo en territorio “pesimista” durante ocho meses seguidos fue en 2020, durante la pandemia de COVID-19.
En octubre, el índice de confianza cayó a 46,5 en una escala de 100 puntos, una baja de un punto respecto a septiembre y de 2,5 puntos respecto a agosto.

“La contratación del gobierno federal está disminuyendo para las pequeñas empresas, y los aranceles están afectando a todos”, escribió un empleador de Massachusetts en su respuesta a la encuesta de AIM.
La encuesta, hecha pública temprano el lunes, llega en un momento en que el cierre del gobierno federal dificulta el análisis de la economía, ya que las agencias federales han suspendido la recolección y procesamiento de la mayoría de las estadísticas oficiales.
“La economía sigue siendo resiliente, con la Reserva Federal señalando que la actividad económica ‘ha estado creciendo a un ritmo moderado’”, dijo Sara Johnson, presidenta de la Junta de Asesores Económicos de AIM, que supervisa el índice de confianza, en un comunicado que acompañó los datos. “Al mismo tiempo, el mercado laboral se está debilitando: el empleo se ha desacelerado y el desempleo de largo plazo ha aumentado. Dado que el mercado laboral es un pilar importante del gasto del consumidor, cualquier señal de pérdidas de empleo crecientes o debilitamiento de los salarios sería una alerta roja”.
El Índice AIM se basa en una encuesta a más de 140 empleadores de Massachusetts, se publica mensualmente desde julio de 1991 y se calcula en una escala de 100 puntos, donde 50 es neutral; un valor por encima de 50 es positivo, mientras que por debajo de 50 es negativo. El índice alcanzó su máximo histórico de 68,5 en 1997-98 y su mínimo absoluto de 33,3 en febrero de 2009.