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Una nueva escuela secundaria católica abrirá la próxima semana en Framingham, y forma parte de una red creciente de colegios que buscan dar a los padres más participación en la educación de sus hijos.
La Chesterton Academy of the Immaculata forma parte de la Chesterton Schools Network, que comenzó con una sola escuela en Minnesota hace más de 15 años.
Desde entonces, afirman haber crecido a casi 70 escuelas en todo el mundo.
Nathalie Calvo, cofundadora y presidenta de la junta de la escuela de Framingham, dijo que la red de escuelas empezó a despegar en 2020.
“Creo que [los padres] querían algo que trascendiera las pruebas estandarizadas y fomentara realmente un amor por el aprendizaje que dure toda la vida, enfocado en el intelecto y el carácter”, dijo. “Así que realmente desarrollar la virtud —algo por lo que las escuelas católicas tienen esa reputación. Enfocarse en la persona completa, no solo en las calificaciones de los exámenes".
Ella explicó que los padres trabajaron para encontrar un director que cumpliera su visión y luego ayudaron más detrás de escena en áreas como la recaudación de fondos una vez que la escuela estuviera en funcionamiento.
Las escuelas de la red Chesterton se enfocan en una amplia gama de temas. Los planes de estudio suelen centrarse en el canon occidental con obras de autores como Homero, Shakespeare y Charles Dickens. Todos los estudiantes participan en el coro.
Decenas de miles de estudiantes en Massachusetts asisten a escuelas parroquiales y privadas, pero representan apenas alrededor del 7% de todos los estudiantes, una disminución desde el 13 % de hace 40 años, según datos estatales. La matrícula ha estado disminuyendo en los últimos años, aunque se estabilizó cuando llegó la pandemia.
En Framingham, la última escuela secundaria católica mixta antes de Chesterton cerró hace siete años.
La Chesterton Schools Network busca formar parte de la recuperación. La escuela de Framingham es la primera en Massachusetts, pero ya existe una escuela Chesterton en Rhode Island que abrió en 2023 y se espera que dos abran en Connecticut el próximo año.
“Los padres realmente están participando en la creación de estas escuelas”, dijo Calvo. “Y eso es, diría yo, algo único de la red también. La red ayuda a equipar a los padres para que puedan ofrecer esta educación como una opción a sus familias".
Actualmente, la matrícula es muy baja. Calvo dijo que les encantaría “llegar a unos 10 a 15” estudiantes, aunque aún no lo han logrado. Pero animan a cualquier persona interesada a comunicarse y postularse. Dijo que muchas escuelas de la red comienzan pequeñas y crecen en años posteriores.
La matrícula es de $10,500, lo que, según el director Ed Caughlan, es más accesible en comparación con otras opciones locales. Junto con el plan de estudios, destacó el tamaño de la escuela como una fortaleza.
“Porque es una escuela pequeña, no te vas a perder entre la multitud, no serás solo un número más, no tendrás que lidiar con mucho del acoso y drama que la gente sufre en la secundaria”, dijo.
“Tenemos maestros que se preocupan por los niños y un grupo pequeño de estudiantes con actividades divertidas. Algunos días reservados llamados ‘house days’, donde no tenemos clases, solo hacemos cosas divertidas que fomentan la comunidad”, agregó Caughlan. “Será una experiencia realmente excelente. Es diferente, pero creo que de una manera muy positiva".
