Hay gran tensión en Boston por la amenaza de Trump. Funcionarios de la Administración Trump insinuaron que el gobierno federal podría intentar asumir el control de South Station, una posibilidad que la gobernadora calificó como "teatro político y más intentos de Donald Trump de concentrar poder".
La gobernadora Maura Healey emitió una declaración este jueves: “Lo que la administración Trump está haciendo en Washington D.C. y ahora amenaza con hacer en South Station es indignante, incorrecto y no tiene nada que ver con transporte ni con seguridad pública. No necesitamos ni queremos su interferencia aquí. No vamos a permitir que el mismo que se declaró en bancarrota seis veces se haga cargo de nuestras estaciones de tren".
Durante la presentación de los nuevos trenes Acela NextGen, el subsecretario de Transporte, Steven Bradbury, sugirió que el gobierno federal podría supervisar South Station debido a problemas de seguridad, limpieza y mantenimiento. La propuesta sigue el modelo de la reciente intervención en Union Station, en Washington D.C.
CBS News explicó que la alcaldesa de Boston, Michelle Wu, dejó claro que no existe base legal para que el gobierno federal tome control de South Station. Señaló que la estación es operada por la MBTA y no pertenece al gobierno federal, lo que hace imposible cualquier intento de intervención desde Washington.
Por el momento, la principal estación ferroviaria de Boston continúa bajo gestión estatal y local.