El año pasado, los estadounidenses sufrieron pérdidas superiores a $5,600 millones como resultado de esquemas de estafas asociados con criptomonedas, según un informe del FBI publicado el lunes, que revela un incremento del 45% en comparación con 2022.
En 2023, el FBI registró cerca de 70,000 denuncias de víctimas de fraudes financieros vinculados al bitcoin, ether y otras criptomonedas.
El tipo de fraude más común fue el fraude de inversiones, que acumuló pérdidas de 3,960 millones de dólares.
Michael Nordwall, subdirector de la división de investigación criminal del FBI, comentó: “La naturaleza descentralizada de las criptomonedas, la velocidad de las transacciones irreversibles y la capacidad de transferir valor alrededor del mundo hacen de las criptomonedas un vehículo atractivo para los delincuentes, al tiempo que crean desafíos para recuperar los fondos robados”.
Estafas con criptomonedas
Los estafadores tienden a contactar a las víctimas a través de aplicaciones de citas o redes sociales, buscando generar confianza en un periodo de varias semanas o meses antes de proponer inversiones en criptomonedas.
Después de establecer una relación, logran convencer a las víctimas de que usen sitios web o aplicaciones fraudulentas para invertir su dinero, a veces incluso permitiendo retiradas de pequeñas cantidades al principio para dar una impresión de legitimidad.
En algunas ocasiones, las víctimas son abordadas por empresas fraudulentas que aseguran poder ayudarlas a recuperar la criptomoneda que han perdido, según informa el FBI.
Los funcionarios del FBI advierten que personas de todas las edades en Estados Unidos pueden ser víctimas de este tipo de estafas y subrayan la importancia de ser extremadamente cautelosos ante oportunidades de inversión ofrecidas por desconocidos en la vida real.