Medios locales reportaron que residuos radiactivos, originados durante la creación de la bomba atómica en Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, serán transportados a un vertedero especializado en residuos peligrosos ubicado en el condado de Wayne, Míchigan.
El condado se alista para recibir una cantidad considerable de desechos, incluyendo 6.000 yardas cúbicas (equivalentes a 4.587 metros cúbicos) de tierra y hormigón contaminados, así como 4.000 galones (15.141 litros) de agua subterránea que estuvo expuesta a niveles elevados de radiación.
Estos desechos provienen de un sitio clave del Proyecto Manhattan, específicamente en la localidad de Lewiston, al noreste del estado de Nueva York, donde se desarrolló la primera bomba atómica.
Desconcierto en la comunidad por llegada de material radiactivo
Por otro lado, CBS News señaló que los residentes cercanos al vertedero del condado de Wayne no tenían conocimiento previo de estos planes.
Reggie Miller, legisladora de Míchigan, se enteró de la inminente llegada de estos residuos a través de los medios de comunicación. «No tenía idea de esto, ni fui notificada. Es exasperante», expresó la funcionaria. «Ese siempre ha sido el problema. ¿Qué pasa si uno de esos camiones se vuelca y el contenido cae al agua? Tenemos el lago más grande del condado de Wayne, y eso ha sido una preocupación constante», añadió.
Está previsto que los residuos tóxicos lleguen a Míchigan en septiembre. El Ejército garantizó que todo el material enviado a Wayne Disposal presentará una radiación inferior a 50 picocurios por gramo, cumpliendo así con la normativa vigente.