Los resultados de una necropsia detallada han arrojado luz sobre la prematura muerte de una ballena común varada en Potter Pond en Rhode Island. La ballena, de aproximadamente 42 pies de longitud y 25,000 libras, fue encontrada en estado crítico de salud, lo que llevó al equipo del Mystic Aquarium y los veterinarios a tomar medidas urgentes.
En South Kingstown, los expertos realizaron una necropsia exhaustiva que reveló que la hembra de ballena común estaba notablemente baja de peso y luchaba contra una infección cerebral y una importante infestación parasitaria en los riñones. A pesar de no presentar signos de daño físico ni enredo, la ballena enfrentaba desafíos significativos para su supervivencia. La técnica de la necropsia permitió un análisis detallado de la situación.
Sarah Callan, responsable del programa de rescate de animales del acuario, expresó una mezcla de alivio y tristeza por la ballena. Los datos obtenidos prometen profundizar en la comprensión de los desafíos que enfrentan las ballenas comunes y ofrecen valiosos conocimientos para su conservación.
La alarma se intensificó con el hallazgo de una segunda ballena, un calderón, en la playa de Moonstone, cuyo avanzado estado de descomposición impidió una necropsia detallada.