Durante el mes de febrero, turistas y locales podrán disfrutar de noches románticas en el «Túnel de Amor», también denominado como “Tunnel of Love” en el Christopher Columbus Park de Boston.
Esta actividad es gratuita y está abierta al público durante todo el mes, de 4:00 p.m. a 10:00 p.m.
En 2018, Boston fue elegido como una de las ciudad más románticas de los Estados Unidos, según un estudio realizado por Instacart, y se ha mantenido entre los primeros diez estados desde entonces.
Este es el séptimo año en el que la ciudad puede celebrar el amor con luces rojas que forman un corazón en la entrada, en contraste por las luces azules que cubren el interior y el exterior del túnel. Con estos colores creando un ambiente romántico, las canciones de amor se reproducen de fondo para celebrar el mes del amor.
Desde 2017, Friends of Christopher Columbus Park, una organización sin fines de lucro administrada por voluntarios, ha estado decorando el túnel del parque con artículos relacionados al amor. Sin embargo, este año hay nuevas sorpresas.
Las adiciones románticas incluyen cinco corazones de caramelo con mensajes como «Be Mine», «Cutie Pie» y «Marry Me». Las empresas cercanas, como Joe’s Waterfront y el Boston Marriott Long Wharf, están apoyando esta iniciativa al decorar sus ventanas con corazones rojos.
El Christopher Columbus Park se ha responsabilizado históricamente en organizar eventos para la comunidad. Este parque se originó en 1970 con el propósito de restaurar el paseo marítimo abandonado a través de esfuerzos públicos y privados. Con la ayuda de los diseños de Sasaki Associates y las aportaciones de la comunidad, el parque abrió sus puertas en 1976, organizando su primer evento: el desfile «Tall Ships».
Desde entonces el parque se encuentra lleno de vida y de actividades gracias a la dedicación y liderazgo de personas como Joanne Hayes-Rines, presidenta y voluntaria de Friends of Christopher Columbus Park. En una entrevista exclusiva, Joanne compartió su historia y las iniciativas emocionantes que han convertido al parque en un destino imperdible para residentes y visitantes por igual.
Con casi 27 años viviendo en Boston, Hayes, una exeditora y publicista de una revista especializada en inventores independientes, encontró su llamado en la comunidad. «Cuando vendí la revista hace 17 años, estaba lista para retirarme», dijo la presidenta. Sin embargo, el temor al aburrimiento la llevó a buscar nuevas formas de contribuir. «Estaba involucrada con el grupo de vecinos y cuando el presidente anterior quería renunciar, me pidieron que considerara ocupar el cargo. Lo hice y han pasado 14 años desde entonces», dice con una sonrisa.
Bajo su liderazgo, el grupo ha florecido, atrayendo tanto a voluntarios locales como a empresas que apoyan financieramente las iniciativas del parque. «Somos todos voluntarios, residentes del área. Trabajamos con empresas locales que nos respaldan financieramente, y también tenemos una membresía que comienza en $25 por persona, lo que aporta una cantidad significativa de ingresos de los vecinos», explica Hayes.
Una de las iniciativas más queridas es el Túnel del Amor, que comenzó como una idea simple hace algunos años. «Nuestra curadora de arte, Robin Reid, tuvo la brillante idea del Túnel del Amor con grandes corazones rojos al final y corazones de dulces gigantes a lo largo del túnel», comparte Joanne con entusiasmo. La atmósfera se completa con música, creando un ambiente encantador para parejas y familias por igual.
Entre risas, Hayes recuerda una anécdota reciente que captura la esencia del evento. «En la víspera de Año Nuevo, una pareja se detuvo frente al muñeco de nieve que teníamos en exhibición y la mujer dijo: ‘No me hagas hablar del Túnel del Amor. Fue ahí donde le dije que lo amaba'», relata con una sonrisa. «Es simplemente mágico ver cómo la gente se conecta con el ambiente y crea recuerdos duraderos», añadió.
Para Hayes, lo más gratificante de organizar estas iniciativas es el apoyo de la comunidad y la colaboración con las autoridades locales. «Tenemos un sólido apoyo de la ciudad y trabajamos en colaboración con ellos para mejorar el parque», destacó. «Es un ejemplo perfecto de una asociación público-privada que beneficia a todos», agregó.
