Stephen Murray, director de la Línea de Ayuda para la Prevención de Sobredosis de Massachusetts, atiende llamadas de personas que consumen drogas en solitario. Cortesía: Stephen Murray.
Stephen Murray, director de la Línea de Ayuda para la Prevención de Sobredosis de Massachusetts, atiende llamadas de personas que consumen drogas en solitario. Cortesía: Stephen Murray.
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Por Martha Bebinger

Massachusetts está financiando una línea directa para la prevención de sobredosis, la primera inversión de este tipo por parte de un estado, según líderes de salud pública.

Hasta ahora, esta línea, que permite a las personas que consumen drogas solas ser monitoreadas durante una llamada y recibir atención médica de emergencia si sufren una sobredosis, ha sido financiada privadamente.

La Línea de Ayuda para la Prevención de Sobredosis de Massachusetts cuenta con personal remunerado y voluntario, muchos de los cuales tienen experiencia con el consumo de drogas. Atienden llamadas las 24 horas del día, los siete días de la semana, proporcionando a las personas que se preparan para inyectarse, ingerir o aspirar drogas un número gratuito: 1-800-972-0590.

Este servicio se gestiona desde el Boston Medical Center (BMC) y se basa en un programa a nivel nacional.

Cuando un trabajador de la línea responde, el que llama proporcionan una dirección y un número de celular. El empleado permanece al teléfono al menos cinco minutos, o incluso más, después del que consume las drogas.

Si el que llama deja de responder, el empleado llama al 911. Solo se comparte la dirección del la persona si se sospecha de una sobredosis. Stephen Murray, director de la Línea de Ayuda para la Prevención de Sobredosis de Massachusetts, recibe llamadas de personas que consumen drogas solas.

«Todas las sobredosis son prevenibles: el naloxone y la respiración de rescate funcionan», dijo Stephen Murray, director de la línea de ayuda de Massachusetts y gerente de un programa de reducción del daño en BMC. «La mayoría de las personas que mueren por sobredosis fallecen solas, sin alguien listo para rescatarlas. Esta línea asegura que reciban ayuda a tiempo».

Este año, el personal ha supervisado casi 600 inyecciones u otros tipos de consumo de drogas y ha llamado a servicios médicos de emergencia en ocho ocasiones por sobredosis.

La financiación estatal comenzó en agosto. Los organizadores dicen que están expandiendo el programa, que opera desde el Grayken Center for Addiction de BMC. La fundación RIZE Massachusetts proporcionó los fondos iniciales. El Consejo Asesor de Reducción de Daños de Massachusetts ayuda a entrenar a los voluntarios.

Las autoridades estatales firmaron un contrato de emergencia con BMC para administrar la línea directa tras reportarse un número récord de sobredosis mortales en 2022: 2,357 personas.

La gobernadora Maura Healey anunció el contrato de $350,000 en una celebración del Mes de la Recuperación. Una portavoz del departamento de salud dice que este año es un piloto y decidirán un enfoque a largo plazo tras revisar los datos de llamadas.

La mayoría de las muertes por sobredosis están relacionadas con el fentanilo, un opioide que puede detener la respiración de inmediato. Pruebas de muestras de drogas recolectadas por diversas organizaciones indican la presencia de fentanilo en cocaína, metanfetamina, pastillas falsas y otras drogas. Los usuarios quizás no se percaten de que las drogas pueden contener este opioide mortal.

Los datos estatales indican que el 90% de las muertes por sobredosis ocurrieron sin supervisión y el 43% de las personas consumió drogas solas, lo que aumenta el riesgo de sobredosis mortal.

«He conocido a muchas familias en duelo a causa de las muertes por sobredosis. Este trauma y dolor pueden evitarse», dijo Healey el martes. «Ofreciendo una alternativa al consumo solitario, la Línea de Ayuda para la Prevención de Sobredosis salva vidas. Massachusetts está comprometido a fortalecer nuestro liderazgo nacional en esfuerzos de reducción y prevención de daños, y seguiremos haciendo todo lo posible para reducir las sobredosis y preservar vidas».

Algunos defensores proponen sitios de consumo supervisado donde las personas puedan usar drogas bajo la vigilancia de personal capacitado, pero hasta ahora no hay ninguno en Massachusetts. La línea directa representa una alternativa.

«La línea de ayuda para la prevención de sobredosis es una herramienta esencial en nuestro arsenal», declaró Deirdre Calvert, directora del Buró de Servicios de Adicción a Sustancias del Departamento de Salud Pública estatal. «Si queremos cambiar la tendencia y reducir las muertes por sobredosis, debemos respaldar programas innovadores y audaces como esta línea de prevención.»

Este artículo fue publicado originalmente el 26 de septiembre de 2023.

Si desea leerlo en inglés visite WBUR.

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