Un gerente de la morgue de la Escuela de Medicina de Harvard y su esposa fueron acusados y arrestados por robar partes del cuerpo humano, incluyendo cabezas, cerebros, piel y huesos, de cadáveres donados y venderlos que estaban destinados a la investigación médica.
Cedric Lodge, de 55 años y otras cinco personas, incluyendo a su esposa, Denise Lodge, de 63 años, enfrentan cargos de conspiración y transporte de bienes robados. Lodge y su esposa formaban parte de una «red a nivel nacional» de personas que compraban y vendían restos humanos provenientes de Harvard y una funeraria en Arkansas, según la oficina del fiscal.
Un investigador y sociólogo en la Universidad de Harvard llamado Jack Porter, radicado en Newton fue uno de los afectados por este escándalo ya que luego de que falleciera su esposa por cáncer de colon donaron el cuerpo a Harvard Medical School. En 2019, él recibió sus restos cremados. Él dijo que la universidad cubrió todos los gastos relacionados, pero luego recibió la noticia de que el cuerpo de su esposa fue uno de los vendidos por el gerente de la morgue. «Ella quería que los estudiantes de medicina aprendieran de su cuerpo, pero hace unas semanas recibí una carta del decano de la escuela de medicina diciendo que el cuerpo de mi esposa estaba entre los 50 y 150 cuerpos que fueron vendidos por Lodge», explicó.
El profesor explicó que un cuerpo completo puede valer 10 mil dólares, pero si lo venden por partes pueden ganar mucho más. «Puedes vender cerebros, pulmones, tejidos, incluidos, genitales, que podrían valer hasta 100 mil dólares», dijo.
En el caso estuvo involucrada la propietaria de Kat’s Creepy Creations en Peabody, Katrina Maclean. Su página de Instagram anuncia «creaciones que impactan la mente y sacuden el alma», incluyendo arte con huesos. También se acusa a dos hombres de Pensilvania, Joshua Taylor y Jeremy Pauley, de formar parte de la red de compra y venta.
Según la acusación, a partir de 2018, Cedric Lodge comenzó a llevar partes del cuerpo donadas para investigación médica a su hogar en New Hampshire. Desde allí, vendieron los restos a otras personas, incluyendo a Maclean y Taylor, a veces enviándolos por correo postal en Estados Unidos.
La acusación afirma que Taylor y Maclean luego vendieron los restos a otros, incluyendo a Pauley. Supuestamente, Maclean almacenó algunos en su negocio en Peabody. El FBI ya había registrado previamente la tienda de Maclean en Peabody en marzo.
Ante lo sucedido, Porter confirmó que se unió a la demanda hacia Harvard. «No me gusta tomar esta acción legal demandar a Harvard porque he estado conectados con ellos desde hace 40 años, pero aún así fueron negligentes», contó.
Por otro lado, Harvard escribió en la carta enviada a las víctimas que se disculpaban por lo acontecido. «Estos presuntos actos criminales son moralmente reprobables e inconsistentes con los estándares que la Escuela de Medicina de Harvard», escribió. «En nombre del profesorado y el personal de la Escuela de Medicina de Harvard, lamentamos profundamente el dolor y la incertidumbre causados por esta preocupante noticia. Nos comprometemos a colaborar con ustedes y brindarles apoyo durante este momento angustiante».
La carta también menciona que la Universidad de Harvard ha designado un panel externo de expertos para evaluar el Programa de Donación Anatómica y las políticas y prácticas de la morgue, con el objetivo de proporcionar comentarios constructivos y recomendaciones para mejorar la seguridad del programa y las generosas donaciones de cuerpos enteros que recibe.
Porter espera que este crimen no disuada a las personas a donar sus cuerpos.» Si Harvard hubiera sabido de esto, lo habría detenido, pero este criminal era muy astuto», aseguró.
