Investigadores federales anunciaron el miércoles la detención de siete hombres de Massachusetts a los que consideran ser los responsables del robo de al menos 2 millones de dólares en catalizadores de vehículos en toda New England en los últimos meses.
Rafael alias“Robin Hood” Dávila, de 35 años, de Feeding Hills, José “Goldy” Torres, de 37 años, de Springfield, Nicolás Dávila, de 25 años, de Springfield, José, alias “Charlito” Fonseca, de 26 años, de Springfield, Zachary Marshall, de 26 años, de Holyoke, Santo Feliberty, de 34 años, de Springfield, y Alexander “Dirty” Oyola, de 37 años, de Springfield, han sido acusados de conspiración para transportar bienes robados en el comercio entre estados, transporte de bienes robados entre estados, conspiración para cometer robo bancario, robo bancario y conspiración de blanqueo de dinero, según la fiscal de los Estados Unidos Rachael S. Rollins.
Durante una investigación de la “Operación Cut and Run”, en la que participaron más de 70 departamentos de policía regionales y agencias federales, los funcionarios pudieron determinar que los sospechosos estaban presuntamente involucrados en el robo de convertidores catalíticos de al menos 471 vehículos en todo Massachusetts y New Hampshire solo en 2022 y 2023. Sin embargo, los investigadores señalaron que creen que un número significativo de robos adicionales no han sido identificados o nunca fueron reportados a las fuerzas del orden.
Rafael Dávila, el jefe de la banda que planeó y participó en todos los robos a tiempo completo, proporcionó transporte a cada vehículo objetivo, determinó los valores de los precios de los convertidores robados y compró los materiales necesarios para cortar los convertidores de los coches, según los documentos de acusación. En numerosas ocasiones, los acusados robaron más de 10 vehículos en una sola noche, y en una de ellas robaron 26 vehículos, según los investigadores.
Una vez en posesión de los catalizadores robados, la banda los vendía supuestamente a José Torres, que acumulaba catalizadores robados de múltiples bandas de ladrones y los vendía a su vez a chatarreros de Connecticut, Rhode Island, Nueva York y Nueva Jersey. Al parecer, Torres vendía a estas entidades entre $30.000 y $80.000 por semana en catalizadores robados, según reporta Boston 25 News
Los chatarreros implicados han sido acusados a nivel federal de transporte interestatal de bienes robados y blanqueo de dinero, entre ellos Alexander Kolitsas y Downpipe Depot en Connecticut.
Además de los robos de catalizadores, Rafael Dávila, Santo Feliberty y Alexander Oyola también conspiraron para robar en cajeros automáticos de bancos asegurados por el gobierno federal en Massachusetts en tres ocasiones distintas en diciembre de 2022, según los investigadores.
Dávila, Feliberty y Oyola también están acusados de cometer robos en dos joyerías de New Hampshire en enero de 2023. El valor total combinado de las joyas robadas se determinó en más de 13,.000 dólares, y cada tienda se enfrenta a unos 10,000 dólares en costes para reparar los daños.
Todos los sospechosos debían comparecer ante un juez del tribunal federal de Boston el miércoles por la tarde.
Fuente de la noticia: Boston 25 News
