El asediado concejal Ricardo Arroyo, cuya campaña para fiscal del distrito de Suffolk se ha visto sacudida por las revelaciones de que había sido acusado de posible agresión sexual en dos ocasiones de cuando era adolescente, aunque nunca se le acusó, parecía luchar contra las lágrimas este jueves mientras decía a un entrevistador que ha sido difícil responder a las acusaciones, que él niega.
“No me gusta el dolor”, dijo Arroyo, con voz temblorosa, dijo esta mañana durante una entrevista el programa “Java With Jimmy”, presentado por James Hills. “Para mí, corrí para mitigar el daño, para evitar el dolor. Y por eso, ver tanto dolor, me duele. Me duele el corazón. Sabes, desde el punto de vista de la gente que hace alegaciones de que no voy a defender a las mujeres que han sido agredidas o a los hombres que han sido agredidos sexualmente, eso es completamente falso”. declaró Arroyo.
Acercándose el día de las elecciones primarias Arroyo enfrenta un duro revés a su campaña electoral, por haber sido investigado dos veces por posibles agresiones sexuales, aunque afirma que nunca fue informado, según reporta el Boston Globe. El actual concejal de la ciudad de Boston no enfrentó cargos luego de investigaciones separadas.
Sus declaraciones se produjeron después de que Arroyo celebrara la semana pasada una rueda de prensa para rebatir un artículo anterior del Globe que revelaba que había sido acusado en dos ocasiones de posible agresión sexual en 2005 y 2007, aunque nunca fue acusado. Arroyo declaró que nunca agredió a nadie y que nunca fue informado de ninguna investigación.
En 2005, una compañera de clase de la escuela secundaria de Arroyo le dijo a la policía de Boston que él la agredió sexualmente, una acusación que Arroyo ha negado repetidamente.
En el reportaje con el Boston Globe la mujer dijo que mantiene todo lo que alegó a la policía sobre Arroyo en 2005, a su vez manifestó que no llevó el asunto a la fiscalía hace años porque le pareció que los funcionarios de la Escuela de Matemáticas y Ciencias John D. O’Bryant escucharon sus preocupaciones y tomaron medidas inmediatamente y no vio a Arroyo en la escuela durante el resto del año escolar.
“Me da asco, asco al estómago“, manifestó la mujer en una entrevista el lunes, “Veo que mucha gente que le sigue respaldando sin averiguar más. Como posible fiscal, las mujeres no se van a sentir seguras llamando a su oficina. Sus casos no serán escuchados”. indicó la mujer según reportaje del Boston Globe.
Arroyo se sintió afectado por segunda vez durante la entrevista radiofónica de este jueves al abordar su ausencia de la escuela en ese momento, reiterando sus declaraciones anteriores de que se fue para cuidar a su madre enferma.
“No sé si alguien ha tenido alguna vez a alguien que le importa en un mal momento, pero esa era mi madre en ese momento”, dijo Arroyo, de nuevo luchando por mantener la compostura, según lo reseña el reportaje.
“Y entonces yo mismo tomé la determinación de apostar por mí mismo. Sabía la inteligencia que tenía, sabía quién era como individuo. Pero mi madre me necesitaba de otra manera en ese momento. Y así, ese fue un estado de trauma para mí en ese momento, y todavía lo es”. Alegó Arroyo a su declaración.
Tras la aparición de la mujer del caso de 2005 en su entrevista con el Globe, Arroyo, un ex defensor público de 34 años, vio cómo se desvanecía su apoyo político de renombre, ya que la alcaldesa de Boston, Michelle Wu, los senadores Elizabeth Warren y Edward J. Markey, y la diputada Ayanna Pressley retiraron su apoyo a su candidatura para el puesto de fiscal.
“Lo único que consiguió el Globe fue una denuncia policial”, dijo Arroyo. “No obtuvieron nada del producto de la investigación. No obtuvieron nada de lo que dijeron los detectives asignados al caso. Toda esa información ha desaparecido. Esa es la información que voy a pedir al tribunal. Y sé que lo que encontraron fue que esas quejas eran infundadas” Declaró Arroyo, en la entrevista del jueves en la mañana.
Para mayor detalles de esta noticia visite el siguiente enlace aquí.
