La MBTA podría enfrentar una crisis financiera en el año fiscal 2024. Funcionario informaron que para ese momento la agencia habrá terminado con los casi $2 mil millones en ayuda federal por COVID-19. Esto conllevaría a un déficit presupuestario superior a los $230 millones.
El State House News Service señala que el 10 de marzo, durante la presentación de proyecciones ante la junta, se indicó que la MBTA utilizará alrededor de $316 millones de sus ingresos para equilibrar el plan de gastos del año fiscal 2023. Y, en el año siguiente, quedarían alrededor de $100 millones restantes. Sin embargo, la directora financiera de MBTA, Mary Ann O’Hara, aseguró que ese remanente no es suficiente para cerrar la brecha que existe entre el dinero que ingresa y el que se gasta para operar trenes y autobuses, sobre todo mientras el número de pasajeros sigue inestable.
El equipo financiero de la MBTA estima que la presión aumentará en los próximos años. Según los npumeros de ingresos y costos, el T podría enfrentar una brecha presupuestaria de entre $341 millones y $551 millones para el año fiscal 2027, según la presentación de O’Hara.
Los costos están creciendo más rápido que los ingresos, en parte debido a las nuevas tendencias de movilidad y también por una inversión significativa en recomendaciones de seguridad, un nuevo servicio en la Extensión de la Línea Verde, el próximo South Coast Rail y la inflación del combustible, según State House News Service.
Asimismo, indicó que las tarifas y los ingresos propios de la agencia solo representan el 9% de lo que la agencia espera recaudar en el año fiscal 22; el resto proviene de los subsidios del gobierno local, estatal y federal.
Los funcionarios no han presentado ningún plan específico para aumentos de tarifas o recortes de servicios y los congresistas no han manifestado alguna intención de replantear el financiamiento del transporte público.
O’Hara aclaró que la MBTA está «limitada en opciones para resolver los desafíos presupuestarios de forma independiente».