Los senadores Edward J. Markey y John Thune, presentaron el miércoles 8 de diciembre un proyecto de ley bipartidista para rastrear los orígenes y acabar con las llamadas fraudulentas que a diario representan una amenaza para la población de EE.UU.
El proyecto permitiría establecer nuevas medidas relacionadas con la tecnología de autenticación de llamadas y establecería mayores sanciones para los responsables y todos los involucrados.
Esta sería la continuación de la TRACED Act, presentada en enero del 2019 por ambos senadores, cuyo objetivo ha sido brindar a las agencias federales las herramientas y la autoridad que necesitan para rastrear, procesar y aplicar multas en contra de los estafadores de robocalls.
La Robocall Trace Back Enhancement Act, es una extensión de la TRACED Act. Esta legislación, por medio de la responsabilidad pública y acciones contundentes contra los estafadores, busca acabar con las llamadas fraudulentas que afectan a una innumerable cantidad de personas», señaló Markey.
La TRACED Act fue promulgada en diciembre de 2019 y, entre otras cosas, requería que la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) designara una entidad para realizar esfuerzos privados para rastrear el origen de las llamadas automáticas ilegales, lo que hizo en julio de 2020 al seleccionar USTelecom-The Industry Traceback Group (ITG) de Broadband Association, como consorcio oficial. En agosto de 2021, la FCC volvió a designar a ITG como consorcio oficial.
El senador Thune aseguró que las estafas a través de llamadas automáticas «están diseñadas para atacar intencionalmente a personas vulnerables», por lo que seguirá trabajando para proteger a los consumidores.
Por su parte la presidenta de la FCC, Jessica Rosenworcel, aseguró que la agencia «está trabajando arduamente para rastrear y eliminar las llamadas automáticas fraudulentas. Pero más herramientas siempre son bienvenidas en esta lucha. Felicitaciones a los senadores Markey y Thune por sus nuevas ideas para reforzar nuestros esfuerzos anti-robocall y poner el foco en los proveedores de teléfonos que facilitan las llamadas fraudulentas».