A medida que los consumidores observan una creciente inflación de los precios de los alimentos, la administración de Joe Biden señala con el dedo a algunas de las empresas cárnicas más grandes del país: lo cual sugiere que la especulación por la pandemia puede ser responsable del fuerte aumento en el valor de los distintos tipos de carne.
El contexto: El valor de la carne de res, cerdo y aves de corral ha aumentado mucho más que otros tipos de alimentos, representa hasta la mitad de la inflación en las tiendas de comestibles. El director del Consejo Económico Nacional, Brian Deese, ha establecido conexiones entre la consolidación de la industria cárnica y los incrementos de precios.
- El gobierno responsabiliza a la especulación en la industria cárnica y tiene como objetivo enjuiciar a los conglomerados avícolas por marcación de precios, fijación de salarios y otras infracciones antimonopolio.
- Productores, cadenas de restaurantes y minoristas también han demandado a las principales empresas cárnicas por prácticas anticompetitivas como la fijación de precios.
- La industria cárnica ha rechazado las acusaciones de la Casa Blanca, al igual que algunos economistas, que aseguran que la consolidación no es la única culpable de los precios más altos.
- Al igual que con otras industrias, la escalada de costos en el negocio de la carne ha elevado los precios: como el incremento de la mano de obra, transporte y empaque. Estos aumentos son trasladados a los consumidores.
¿Qué dicen? “La Casa Blanca está tratando de distraer la atención de cualquier forma posible”, aseguró Don Close, analista senior de proteínas animales del grupo RaboResearch Food & Agribusiness, que analiza datos agrícolas.
- Close dijo que la orden ejecutiva de Biden, que toma medidas enérgicas contra la consolidación en la industria cárnica, contenía información inexacta o sesgada sobre las empresas.
Fuente principal de la noticia: The Washington Post.