Deborah Becker
Click here to read this article in English, by WBUR
El Departamento de Corrección de Massachusetts se enfrenta a una demanda en la que se le acusa de utilizar pruebas defectuosas para detectar drogas ilegales en los correos enviados a personas tras las rejas.
En la denuncia también se alega que, a menudo, las pruebas indican falsamente la presencia de sustancias ilícitas, en consecuencia son sancionados los encarcelados y los abogados son señalados injustamente de enviar drogas a sus clientes en prisión.
Los test, llamados NARK II, se utilizan para detectar cannabinoides sintéticos. Este tipo de sustancias se pueden rociar sobre un papel o fumar, para producir efecto. Pero la demanda, presentada por abogados penales y un grupo de reclusos en prisiones estatales, dice que la caracterización química de la tinta y el papel frecuentemente dan como resultado un falso positivo.
«Estas pruebas son menos precisas que la brujería, la frenología o simplemente como sacar un número de un sombrero», señala la denuncia. «Las pruebas con sustancias químicas inocuas que se encuentran comúnmente en el papel generan usualmente falsos positivos, casi el 80% de las veces, según la estimación de un funcionario del DOC».
Según la demanda, si alguien encarcelado recibe un correo que da positivo, este puede admitir haber cometido un delito o solicitar una prueba de laboratorio independiente. Si opta por la ultima opción, el preso podría ser puesto en régimen de aislamiento mientras espera los resultados, lo que puede llevar meses. También se le podría exigir al prisionero que pague la nueva prueba.
Uno de los demandantes, el abogado defensor James McKenna, dijo que los funcionarios del DOC le indicaron en 2018 que el correo que envió a un cliente en el Centro Correccional Souza-Baranowski había dado positivo por el cannabinoide sintético conocido como K-2. Después de que su cliente estuvo confinado en su celda durante tres días debido al presunto contrabando por medio del correo, McKenna contó que al prisionero le informaron que los resultados podían volver a examinarse, pero que tendría que pagar la prueba de laboratorio de $100, así como las tarifas
Uno de los demandantes, el abogado defensor James McKenna, dijo que los funcionarios del DOC le indicaron en 2018 que el correo que envió a un cliente en el Centro Correccional Souza-Baranowski había dado positivo por el cannabinoide sintético conocido como K-2. Después de que su cliente estuvo confinado en una celda durante tres días debido al presunto contrabando por medio del correo, McKenna contó que al prisionero le informaron que los resultados podían volver a examinarse, pero que tendría que pagar la prueba de laboratorio de $100, así como las tarifas obligatorias por test de drogas que se le impondrían debido al correo.
«Diez semanas después del falso positivo de la prueba, el 23 de octubre de 2018,
el cliente del Sr. McKenna indicó que los funcionarios de la Instalación Correccional de Souza-Baranowski se ofrecieron a darle el trabajo que quería, retirar la multa pendiente y permitirle avanzar hacia un rango de menor peligro si decía que el Sr. McKenna le envió droga intencionalmente», señala la demanda. «El cliente del Sr. McKenna rechazó la oferta coercitiva del DOC».
Dos meses después, según la denuncia, los funcionarios del DOC le dijeron a McKenna que la prueba de laboratorio había resultado negativa y que la multa disciplinaria contra su cliente fue desestimada.
«Estas prueba defectuosas han generado un daño serio en nuestros clientes, los abogados y la relación abogado-cliente, y el DOC debería dejar de usarlas de inmediato», dijo Anthony Benedetti, asesor principal del Comité de Servicios de Asesoría Pública. El test ha detectado drogas cuando no las hay; y nuestros clientes, que no tienen control sobre quién les envía correos, han recibido castigos aislándolos del resto de la población reclusa debido a resultados incorrectos. Los abogados han sido acusados erróneamente de enviar drogas a las instalaciones del DOC cuando simplemente estaban tratando de hacer llegar un correo legal a sus clientes».
Las pruebas las realiza Sirchie Acquisition Company LLC, que tiene su sede en Carolina del Norte. La demanda también nombra a Sirchie y a su agente de ventas Premier Biotech, Inc.
Por su parte, el DOC no emite comentarios sobre litigios pendientes. Cuando un abogado mencionó este tema el año pasado, el DOC explicó que todo envío se examina y a algunos se puede revisar en las sedes cuando parece que se trata de contrabando. El departamento dijo que a menudo parte de los correos dicen ser de abogados cuando no lo son.
