Aunque en el mundo avanza la vacunación contra el COVID-19, no todos los territorios presentan altas tasas de dosis aplicadas. La situación aún pone freno a la reactivación total en varios de sus sectores y en su lugar el tiempo de espera se amplía. Las restricciones tienen incidencia en toda área, con los vuelos como una dinámica alterada por la pandemia.
¿Por qué importa?
Las medidas impuestas en cada nación responden a evitar la propagación del virus, el cual acumula en el continente americano más de 55 millones de casos y más de un millón y medio de muertes por complicaciones vinculadas a la pandemia.
Contexto: Variante delta
Aunque los datos de la Universidad Johns Hopkins confirman que en el mundo se han aplicado más de tres mil millones de dosis de vacunas contra el COVID-19, la variante delta se presenta como un empujón hacia la tercera ola. Solo en EEUU, el 51% de los nuevos casos estuvieron vinculados a dicha cepa entre el 20 de junio y el 3 de julio, según los CDC.
¿Qué esperar?
Pese al impacto de la variante delta, el sector aéreo apunta a un norte esperanzador. La Administración de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos informó que el viernes 11 de junio el país contabilizó más de 2 millones de personas trasladándose en aeropuertos por primera vez en 15 meses. La cifra es alentadora para un rubro que aspira a alimentar su registro.
Voz oficial: Preparados
Luego del movimiento registrado el fin de semana del 4 de julio, el director de operaciones de American Airlines, David Seymour, dijo a AP que “después de un año desafiante, este fin de semana demostró que la gente está lista para viajar nuevamente”.
La cifra: 15%
La baja en los viajes también representa un duro golpe en las ganancias de las aerolíneas. Según el portal Investing.com, las empresas acumulan pérdidas por un 15% desde el arribo de la pandemia, descenso que esperan superar en los próximos meses.