ZUMIX, un centro de música para jóvenes ubicado en East Boston, recibió una donación de $1 millón por parte de la filántropa MacKenzie Scott, ex esposa del fundador de Amazon, Jeff Bezos. La organización invertirá los fondos para alcanzar una estabilidad financiera a largo plazo.
Desde hace 30 años ZUMIX brinda educación y empleo en artes y tecnología creativa a las nuevas generaciones de jóvenes. «Recibir este grado de apoyo y reconocimiento es increíble», dijo Nikki Stewart, presidenta de la Junta Directiva. «Esto honra el arduo trabajo, la dedicación y el liderazgo de nuestro personal, varios de los cuales son ex alumnos».
East Boston ha sido una de las comunidades más golpeadas debido al COVID-19 . «Los jóvenes y las familias se han visto gravemente afectados por los efectos de la pandemia y necesitan programas como ZUMIX para reforzar su bienestar emocional, creativo y educativo», indicó Madeleine Steczynski, cofundadora y directora ejecutiva.
La organización ofrecerá una combinación de programas presenciales, virtuales e híbridos este verano. Espera reanudar el aprendizaje totalmente en persona este otoño, con música instrumental, composición de canciones, radiodifusión y periodismo, ingeniería de audio y producción de videos.
ZUMIX fue una de las casi 300 organizaciones que recibieron donativos por parte de Scott, quien tras su divorcio se comprometió a repartir la mayor parte de su fortuna multimillonaria. Luego de su separación recibió el cuatro por ciento de las acciones de Amazon, según The New York Times. Actualmente, su patrimonio neto es de aproximadamente 60,000 millones de dólares, señala Forbes.
Esta es su tercera ronda de donaciones en menos de un año. Los beneficiarios van desde compañías de baile hasta universidades y organizaciones de justicia racial, e incluyen a 23 organizaciones sin fines de lucro de Nueva Inglaterra.
Scott destacó las artes como un área de enfoque en su publicación en Medium asegurando que «las instituciones artísticas y culturales pueden fortalecer a las comunidades transformando espacios, fomentando la empatía, reflejando la identidad comunitaria, promoviendo la movilidad económica, mejorando los resultados académicos, reduciendo las tasas de criminalidad y mejorando la salud mental”, escribió.