La extensión de la Línea Verde impulsará el sistema de transporte de Somerville y Medford. Sin embargo, el proyecto que originalmente pretendía servir a las comunidades de escasos recursos; terminará beneficiando a los más ricos, según un análisis de equidad presentado por la MBTA el lunes 24 de mayo.
Los resultados de un estudio requerido bajo Civil Rights Act para proyectos que reciben fondos federales mostraron que la extensión de la Línea Verde es de gran beneficio para «los pasajeros que no pertenecen a minorías y (…) los que no son de bajos ingresos».
Esto se atribuyó en parte a los cambios demográficos en los vecindarios cercanos a las que serían las nuevas paradas de la Línea Verde. Si bien estas áreas contarán con un mayor servicio, esto no supondrá un impacto negativo para el resto de la población.
«Todo el mundo estará recibiendo un mejor servicio, pero algunas personas se verán más favorecidas que otras», indicó Lynsey Heffernan, directora de política y planificación estratégica de la MBTA.
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Los funcionarios tienen programado comenzar los servicios en Union Square en octubre, para luego seguir con Medford en diciembre, según una presentación del 29 de marzo realizada por el gerente general de MBTA, Steve Poftak.
La foto de un mapa de la MBTA en la recientemente renovada estación de Commuter Rail en Ruggles, Boston, incluye la extensión de la Línea Verde. Allí puede verse que la rama de Union Square tendrá una parada y será parte de la Línea Verde D, hacia Riverside Station en Newton. Por su parte, Medford estará en la subdivisión E hacia Heath Street en Jamaica Plain.
